El Banco Central Europeo (BCE) y el Banco Popular de China (PBOC) han dado a conocer la extensión de su acuerdo bilateral de ‘swap’ de euros y yuanes por un periodo adicional de tres años. Esta prolongación se mantendrá vigente hasta el 8 de octubre de 2028, según el comunicado emitido por ambas entidades el pasado lunes.
El convenio original data del 8 de octubre de 2013 y fue concebido con un fondo máximo de 350.000 millones de yuanes, equivalentes a 35.796 millones de euros, y 45.000 millones de euros. Desde su creación, este acuerdo ha sido prorrogado en 2016, 2019 y nuevamente en 2022, siempre en intervalos de tres años. La extensión actual busca mantener la estabilidad financiera ante cualquier potencial escasez de liquidez de yuanes en el Eurosistema.
El BCE ha explicado que este acuerdo se utiliza como una herramienta de protección para confrontar una «potencial y súbita escasez de liquidez de yuanes» en el sistema económico europeo, efecto de la inestabilidad de los mercados financieros relacionados con la moneda china.
El acuerdo con el PBOC es coherente con los grandes volúmenes de comercio e inversión bilaterales entre la eurozona y China
Estas palabras del instituto emisor subrayan la importancia y la estrategia detrás de este convenio, reforzando así las relaciones económicas entre ambas potencias.
El pasado 11 de junio, Christine Lagarde, presidenta del BCE, y su homólogo del PBOC, Pang Gongsheng, formalizaron en Pekín un Memorándum de Entendimiento (MdE) para actualizar la cooperación en el ámbito de la banca central, renovando un compromiso inicial que data de 2008.
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