En la media sesión de este miércoles, el Ibex 35 registraba un descenso del 1,40%, profundizando la caída iniciada en la apertura y situándose en los 13.180,4 puntos. Este retroceso se debe principalmente a la cotización a la baja de los valores bancarios.
Durante esta jornada, numerosas empresas cotizadas han presentado sus resultados. Entre ellas, CaixaBank reportó beneficios de 1.470 millones de euros en el primer semestre, lo que representa un aumento del 46,2%. Por otro lado, Banco Santander logró unas ganancias de 3.402 millones de euros, un 19% más que el año anterior. Sin embargo, no todos los resultados fueron positivos; Repsol mostró una caída del 62% en sus beneficios, alcanzando los 366 millones de euros, mientras que Iberdrola reportó 2.004 millones de euros en ganancias, un 27,4% menos.
Los inversores están atentos a la publicación de los datos de PIB en Estados Unidos
En el ámbito internacional, se ha dado a conocer que la actividad de las fábricas en China se deterioró en abril al mayor ritmo desde diciembre de 2023, según el índice PMI oficial, indicando la repercusión de los aranceles cruzados entre Estados Unidos y China. Por otro lado, Eurostat ha informado que la economía de la zona euro creció 0,4% en los primeros tres meses de 2025, duplicando el ritmo de expansión del 0,2% observado en el último trimestre de 2024, aun ante las tensiones arancelarias con Estados Unidos.
En cuanto a las acciones de los bancos, hacia las 12:00 horas, CaixaBank caía un 5,36%, seguido de Banco Santander con -4,87%, Redeia a -4,74%, y otros valores como ArcelorMittal (-4,70%) y Unicaja (-3,18%). En cambio, las acciones de Aena y Rovi mostraron un desempeño positivo, con subidas de 2,78% y 1,56% respectivamente.
En el resto de los principales mercados europeos, solo Milán estaba en negativo, con una caída del 0,30%. En contraste, Londres subía un 0,15%; París, un 0,59%; y Fráncfort, un 0,63%.
El barril de Brent se cotizaba a 63,66 dólares, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) alcanzaba los 59,93 dólares. El rendimiento del bono español a 10 años se situaba en 3,133%, en comparación con el 3,163% del cierre anterior. La prima de riesgo respecto a la deuda alemana alcanzaba los 66,7 puntos básicos, y el euro se depreciaba un 0,21% frente al dólar, situándose en 1,1363 dólares por cada euro.
