En el inicio de la jornada bursátil de este jueves, el Ibex 35 ha presentado un comportamiento casi plano, con un ligero avance del 0,02%. Esta ligera subida le permitió mantenerse inicialmente por encima de los 14.100 puntos, a pesar de la incertidumbre generada por la guerra comercial y la próxima reunión del Banco Central Europeo (BCE), donde se anticipa un nuevo recorte de tipos de interés.
No obstante, pocos minutos después de la apertura, el índice español se tornaba negativo, registrando un descenso del 0,3%, lo que suponía perder la barrera de los 14.100 puntos. A las 9:09 horas, el Ibex 35 se situaba en torno a los 14.040 puntos. Los inversores continúan atentos a la tensa situación comercial entre Estados Unidos y China, especialmente después de la entrada en vigor de los aranceles incrementados al acero y aluminio estadounidenses. Dichas tensiones podrían volver a intensificarse durante una inminente conversación telefónica entre los líderes de ambas naciones.
En España, el Tesoro Público tiene previsto captar entre 4.750 y 6.250 millones de euros mediante una emisión de bonos y obligaciones del Estado, la segunda operación de este tipo en junio. Esta captación tendrá lugar en un contexto de expectación por la próxima reunión del BCE y las declaraciones de su presidenta, Christine Lagarde. Dentro del Ibex 35, Grifols lideraba las alzas con un incremento del 1,5% en la apertura, impulsado por la expectativa de aprobación de un plan de retribución variable en acciones durante su junta general ordinaria de accionistas.
Por el lado contrario, Bankinter encabezaba los descensos con una caída del 1,4%
, seguida de Unicaja (-0,63%), BBVA (-0,53%) y Enagás (-0,32%). En el ámbito europeo, los principales índices en Fráncfort, París y Londres registraban subidas del 0,1%, 0,2% y 0,07% respectivamente a la misma hora.
En el mercado de materias primas, el precio del barril de petróleo Brent subía un 0,4%, alcanzando los 65,15 dólares, mientras el crudo Texas se cotizaba a 63,06 dólares, incrementándose en un 0,3%. Respecto al mercado de divisas, el euro mantenía una cotización frente al dólar de 1,1421. En cuanto a la deuda, el interés sobre el bono español a 10 años experimentaba una relajación, situándose en el 3,103%.
