El índice de precios de consumo (IPC) de China mostró una ligera subida del 0,1% en junio en comparación con el mismo mes del año anterior, según los últimos datos facilitados por la Oficina Nacional de Estadística (ONE). Con esta subida, el IPC pone fin a cuatro meses consecutivos de descensos. En el mismo período, los precios de los alimentos registraron una disminución interanual del 0,3%, manteniendo la tendencia a la baja pero con una leve mejora respecto al mes anterior.
Los precios de los productos no alimentarios se incrementaron un 0,1%, mientras que los bienes de consumo tuvieron una caída del 0,2%. Por su parte, la tasa de inflación subyacente, que prescinde de la volatilidad del coste de alimentos frescos y energía, ascendió un 0,7% interanual, marcando una aceleración en relación a mayo.
En el ámbito industrial, los precios de producción experimentaron una caída más pronunciada del 3,6% en junio, en comparación con el descenso del 3,3% en mayo, alargando a 33 meses seguidos el periodo de deflación. Este resultado representa la mayor caída interanual registrada desde julio de 2023.
El jefe de estadística del Departamento Urbano de la Oficina Nacional de Estadística, Dong Lijuan, mencionó que las fuertes altas temperaturas y lluvias impactaron en el progreso de ciertos proyectos de construcción, afectando así los precios industriales. Además, el aumento de la generación de energía "verde", incluyendo la solar, eólica e hidroeléctrica, ha redundado en una disminución en los precios de la energía.
Los precios de algunas industrias con una alta proporción de exportaciones están bajo presión debido a la desaceleración del crecimiento del comercio mundial y la incertidumbre internacional, advirtió Dong Lijuan, indicando así otro factor de preocupación en el panorama económico chino. Estas condiciones han afectado las expectativas de exportación de las empresas, influyendo en la evolución económica del país.
El IPC de China baja en mayo un 0,1% y suma cuatro meses en deflación
