El proceso de integración de Bulgaria en el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) ha dado un paso crucial esta semana. La Junta de Gobierno del MEDE ha aprobado la solicitud del país para incorporarse al organismo, consolidando así su camino hacia la adopción del euro. Pierre Gramegna, director gerente del MEDE, subrayó la importancia de esta decisión: «Esta decisión es un hito clave en un momento en que el país se prepara para implantar el euro y profundizar su integración en el marco financiero europeo».
Con la meta de adoptar el euro el 1 de enero, Bulgaria se posiciona como el vigésimo primer Estado miembro de la eurozona. Este cambio no solo subraya el fortalecimiento de la economía búlgara, sino que también destaca la vigencia del euro como moneda de referencia. Gramegna destacó que «la adhesión reforzará la resiliencia de Bulgaria frente a riesgos y respaldará su estabilidad», confirmando que el crecimiento del MEDE y de la eurozona refuerza la red de seguridad proporcionada por la moneda única.
El crecimiento continuado del MEDE y de la eurozona subraya la fortaleza y el atractivo de la moneda única y la red de seguridad que proporciona
El camino hacia la incorporación en el MEDE contempla la ratificación del Tratado del MEDE y del acuerdo de enmienda por parte de Bulgaria. Este proceso, que se prevé concluir en el primer semestre de 2026, será seguido por la entrada oficial del país en el MEDE. La adhesión incluye un periodo de adaptación de 12 años, durante el cual la aportación inicial de capital por parte de Bulgaria será de unos 600 millones de euros, aumentado a 992 millones al finalizar dicho periodo.
En resumen, la decisión tomada representa un paso significativo para Bulgaria al fortalecer su posición dentro de la Unión Europea y asegurar la estabilidad económica a largo plazo mediante su integración plena en el marco financiero europeo.
