El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, ha declarado este domingo que el presidente Donald Trump no tiene intención de revertir la nueva política arancelaria hasta que la comunidad internacional, que ha sido afectada por los gravámenes, presente sus propuestas. Bessent ha descartado que esta nueva situación lleve al país a una recesión. «No veo motivo alguno para calcular una recesión», afirmó, señalando que desde el anuncio de los aranceles, alrededor de cinco décimas de países se han comunicado con la Administración Trump para iniciar negociaciones bilaterales, aunque no reveló detalles sobre los estados en cuestión.
En una entrevista con la cadena NBC, el secretario del Tesoro explicó que la Administración Trump ha estado considerando esta política desde el inicio de la pandemia de coronavirus. «Este es un problema de seguridad nacional, que vimos durante esa época con su impacto en nuestras cadenas de suministro. El presidente Trump ha decidido que no podemos correr el riesgo de depender de países extranjeros para nuestros medicamentos cruciales, semiconductores y envíos», sostuvo Bessent.
Las negociaciones no serán cuestión de días, ni siquiera de semanas
Bessent también hizo énfasis en el carácter punitivo de esta medida, dirigida a países que «desde hace mucho tiempo han sido malos actores» económicos. Además, subrayó que cualquier posible acuerdo dependerá de la oferta que se reciba: «Después de décadas de mal comportamiento uno no puede hacer borrón y cuenta nueva», concluyó el secretario del Tesoro.