La Junta Única de Resolución ha decidido ajustar los requisitos mínimos de fondos propios y pasivos elegibles (MREL, por sus siglas en inglés) para el Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA). Esta modificación ha sido comunicada a la entidad por el Banco de España.
Los requisitos MREL son fundamentales para garantizar que los bancos mantengan un «colchón anticrisis», destinado a absorber pérdidas en caso de problemas financieros. El objetivo es evitar el uso de fondos públicos en la resolución de problemas bancarios, asegurando que acreedores y accionistas sean quienes asuman las pérdidas.
BBVA debe ahora mantener un volumen de MREL equivalente al 23,13% de sus activos ponderados por riesgo (APR). De este total, al menos un 13,50% debe estar en instrumentos subordinados. Para la exposición total que se considera en el cálculo de la ratio de apalancamiento, el requisito se ha incrementado del 8,48% anterior al 8,59%.
En términos de subordinación, el requisito ha sido ajustado al 5,66%, una ligera disminución respecto al 5,78% previo.
A estos porcentajes, se debe añadir el requisito combinado de colchones de capital aplicable, que según la normativa vigente representa un 3,65% adicional. BBVA asegura que la estructura actual de fondos propios y pasivos es suficiente para cumplir con todos los requerimientos establecidos.
Según los datos más recientes, a 31 de diciembre de 2023, el total de activos ponderados por riesgo del grupo de resolución de BBVA era de 214.757 millones de euros, mientras que la exposición total para el cálculo de la ratio de apalancamiento ascendía a 517.470 millones de euros.
