El cierre de 2024 para los planes de pensiones de empleo simplificados muestra un volumen de activos bajo gestión de 388 millones de euros y 674.330 partícipes, según datos de la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco) consultados por Europa Press. Este panorama refleja las dinámicas actuales del sector.
A detalle, la patronal española ha destacado que, al finalizar el ejercicio, había 42 planes de empleo simplificados para autónomos que acumulaban 246 millones de euros y contaban con 52.250 partícipes. Además, se registró un plan sectorial de empleo simplificado, específicamente del sector de la construcción, que acumuló 142 millones de euros y 622.000 partícipes.
Las aportaciones netas a estos planes simplificados en 2024 alcanzaron los 273,4 millones de euros, siendo 133,7 millones de este total correspondientes a planes para autónomos. Este crecimiento se produce tras la reforma normativa impulsada en 2022 por el entonces ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, con el objetivo de favorecer los planes de pensiones de empleo en lugar de los individuales, que históricamente dominan el mercado.
El cambio incluyó la creación de fondos de pensiones de empleo de promoción pública, con comisiones competitivas, asignados a entidades como BBVA, Caser, VidaCaixa, Santander e Ibercaja. Aunque se esperaba que, tras tres años, estos fondos reuniesen 2.500 millones de euros, su desarrollo ha sido más lento de lo esperado, limitando su efectividad como opción de ahorro para empresas y sus planes.
La drástica reducción del límite de aportación ha producido una disminución de más de 9.800 millones de euros en el volumen de aportaciones brutas en el sistema individual
Para equilibrar las contribuciones entre sistemas, el Gobierno redujo las aportaciones anuales al sistema individual de 8.000 a 1.500 euros, mientras que en los planes de pensiones de empleo el límite se mantiene en 8.500 euros. Inverco ha criticado esta decisión, advirtiendo sobre la futura disminución esperada de 2.700 millones en aportaciones recurrentes por la falta de aprovechamiento de los fondos de empleo.
No obstante, en 2024, los planes de empleo experimentaron una mejora significativa al registrar por primera vez desde 2011 aportaciones netas positivas por un valor de 170 millones de euros, gracias al impulso de los planes de autónomos y sectoriales debido a la reciente normativa. El patrimonio de los planes de empleo creció un 5,9%, alcanzando los 38.820 millones de euros.
En contraste, los planes del sistema individual también mostraron un aumento del 8,6%, llegando a 98.250 millones de euros, aunque esto se debe en gran parte a la revalorización de activos y no a un incremento en las aportaciones, reflejando así una salida neta de 615 millones de euros debido a jubilaciones y las limitaciones impuestas en las contribuciones.
Para revitalizar los planes de pensiones, Inverco ha propuesto la ampliación de los límites de aportación en los planes individuales hasta 5.000 euros y la implementación de medidas transitorias para estimular los planes de empleo. Además, se exhorta a permitir mayor flexibilidad a los autónomos en cuanto a las aportaciones anuales y la posibilidad de realizar contribuciones transitorias al sistema individual.
