Los títulos de Repsol experimentaron un notable repunte este lunes en la Bolsa española, aumentando más de un 3% gracias a la valoración positiva de Morgan Stanley sobre su estrategia financiera y el ascenso en los precios del petróleo, con el barril de Brent superando los 65 dólares. La compañía energética destacó en el Ibex 35, cerrando la sesión con un aumento del 3,2%, alcanzando un precio de 11,625 euros por acción, su nivel más elevado desde principios de abril.
En un informe reciente, Morgan Stanley ha elevado su recomendación sobre Repsol a ‘sobreponderar’ (‘overweight’) y ha aumentado su precio objetivo a 13,3 euros por acción, lo que implica un incremento de casi el 11% respecto a su anterior estimación de 12 euros y del 18% en comparación con los precios de cierre de la semana pasada. Los analistas de la firma estadounidense, que consideran que el desempeño del sector energético «sigue estando estrechamente ligado a los mercados del petróleo», han situado a Repsol entre sus empresas favoritas, junto a gigantes como Shell, TotalEnergies, Equinor, Eni y BP.
Repsol ha indicado que, en un escenario de estrés, su flujo de caja de operaciones (CFFO) de 2025 podría disminuir en 500 millones de euros
Morgan Stanley señala que, a pesar de esta posible disminución, la compañía mantendría una distribución de beneficios a sus accionistas de aproximadamente 1.800 millones de euros, lo que representaría entre el 30% y el 35% de su flujo de caja de operaciones, en alineación con su compromiso. Las inversiones netas de Repsol se estiman entre 3.000 y 3.500 millones de euros. Además, se valora que la empresa tiene la flexibilidad necesaria para reducir sus gastos de capital de manera significativa en caso de un deterioro de las condiciones macroeconómicas.
Con un FCF (flujo de caja libre) ajustado y distribución de rendimientos en el extremo superior del sector, mejoramos nuestra calificación a ‘overweight’
