El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado que Toyota planea instalar plantas automovilísticas en todo Estados Unidos, con una inversión superior a los 10.000 millones de dólares (8.500 millones de euros). Este anuncio se hizo durante una visita a Japón, donde Trump se dirigió a las tropas estadounidenses destacando que «muchas cosas» están ocurriendo en Estados Unidos gracias a la política arancelaria aplicada a mediados de año.
Trump afirmó que su política está propiciando que grandes empresas internacionales reconsideren sus inversiones hacia Estados Unidos. De materializarse, Toyota se unirá a empresas como Stellantis o Hyundai, que han anunciado también grandes cifras para impulsar su producción en el país.
La primera ministra de Japón, Sanae Takaichi, confirmó el compromiso de Toyota, lo que según Trump se traduce en un impulso importante para la economía estadounidense. «Así que, vayan y compren un Toyota«, instó a las tropas el mandatario.
En el contexto de su visita a Japón, Trump firmó junto a la primera ministra Takaichi un importante acuerdo sobre el procesamiento y suministro de tierras raras y minerales críticos. Este pacto refuerza la cooperación entre ambos países asegurando el suministro seguro de estos recursos esenciales para sus industrias.
Los participantes intensifican sus esfuerzos de cooperación para acelerar el suministro seguro de minerales críticos y tierras raras necesarios para apoyar a las industrias nacionales
El acuerdo incluye un compromiso por parte de Washington y Tokio para financiar proyectos mineros en un plazo de seis meses. Además, se buscará agilizar los procesos de permisos mineros y desarrollar mecanismos que eviten la venta no controlada de activos de minerales por motivos de seguridad nacional.
