El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, ha expresado que aún existe la posibilidad de bajar los tipos de interés en septiembre, aunque enfatizó que esto dependerá de dos informes cruciales que se publicarán sobre inflación y empleo. Powell aclaró que la Fed no tiene un camino predeterminado para su política monetaria.
Powell destacó que, durante este periodo, se evaluarán nuevas lecturas de empleo e inflación antes de la importante reunión de septiembre. Manifestó que la Reserva Federal considerará toda la información disponible para decidir sus próximos pasos. Actualmente, los tipos de interés se mantienen entre el 4,25% y el 4,50%, lo que Powell describió como un rango moderadamente restrictivo. Esta medida busca preparar a la Fed ante cualquier eventualidad macroeconómica, especialmente tras observar cómo los aranceles se reflejan ya en los precios.
Powell ha insistido en la importancia de que los bancos centrales sean independientes
El presidente de la Fed llamó la atención sobre el crecimiento económico de EE.UU., que ha mostrado una ralentización en la primera mitad del año. El PIB avanzó un 1,2%, contrastando con el 2,5% de la segunda mitad de 2024. Sin embargo, los datos del segundo trimestre revelaron una expansión del 3%, en comparación con una contracción del 0,5% en el primer trimestre. Esta variabilidad es atribuida, en parte, a la volatilidad en las importaciones, afectadas por los aranceles del presidente Donald Trump, lo que ha influido en el cálculo del PIB.
Por su parte, Powell apuntó que el gasto de los consumidores se ha desacelerado, mientras que la inversión empresarial, especialmente en equipos e intangibles, ha repuntado respecto al año anterior. También predijo que la ‘Gran y Hermosa Ley’ de Trump, que consagra bajadas de impuestos, tendrá un efecto algún efecto estimulante sobre la economía, aunque probablemente no será sustancial a largo plazo.
