El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha revelado que el Perte de Vivienda para la construcción industrializada contará con una inversión pública de 1.300 millones de euros a lo largo de diez años. Esta iniciativa buscará implementar diferentes instrumentos financieros del Estado, además de movilizar inversión privada en este ámbito. Con este plan, se pretende construir una media de 15.000 viviendas industrializadas anualmente, aspirando a alcanzar las 20.000 viviendas anuales en el plazo de una década.
Durante la clausura de la feria Rebuild, Sánchez destacó que esta medida es “una herramienta fundamental para situar a España a la vanguardia de la industrialización de la edificación”. En su discurso, reafirmó la necesidad de un cambio de paradigma en el sector de la construcción, abogando por una mayor industrialización, digitalización y sostenibilidad. Los tres objetivos subyacentes de este plan son: construir más y mejores viviendas, aumentar la velocidad de construcción y ofrecer precios más asequibles.
Es hora de avanzar con toda determinación en un modelo industrializado
Asimismo, el presidente del Gobierno indicó que el Perte servirá no solo para reducir los impactos de residuos y las emisiones de dióxido de carbono, sino también para mejorar las condiciones laborales en el sector de la construcción, lo que beneficiará a los empresarios del mismo. “Acceder hoy a una vivienda digna en condiciones económicas asequibles es, lamentablemente, un sueño imposible para millones de personas”, lamentó.
En este contexto, Valencia se perfila como la principal protagonista de este Perte de industrialización, dado que se establecerá la nueva ciudad de la industrialización de la construcción en esta región. “Con ello, también vamos a contribuir a potenciar el desarrollo económico e industrial de una de las áreas más afectadas por la DANA el pasado 29 de octubre en Valencia. Una tierra que necesita vivienda, pero no de cualquier tipo”, subrayó Sánchez.


