La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha señalado que los aranceles impuestos recientemente por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, constituyen un punto de inflexión extraordinario para el país norteamericano. Durante una conversación telefónica con el primer ministro británico, Keir Starmer, Von der Leyen expresó su preocupación por el impacto negativo que estos gravámenes generan, no solo en Estados Unidos, sino también en todos los países, incluyendo a las naciones más vulnerables.
A pesar de la severidad de la decisión, la presidenta reafirmó el compromiso de la UE de dialogar con Estados Unidos, aunque también indicó que está dispuesta a defender los intereses de Europa mediante contramedidas si fuese necesario. Además, Von der Leyen destacó su determinación en colaborar con los socios internacionales para responder a la nueva realidad económica, aunque advirtió que, “cada socio comercial actuará de acuerdo con sus propias prioridades”.
La próxima Cumbre UE-Reino Unido del 19 de mayo representa “una oportunidad importante para fortalecer la cooperación”
En el transcurso de la conversación, ambos líderes también discutieron los preparativos para la próxima Cumbre UE-Reino Unido, la cual Von der Leyen describió como una oportunidad clave para fortalecer la cooperación en asuntos de seguridad, defensa, comercio y economía. Previo a este evento, Von der Leyen tiene programada una reunión con Starmer en Londres el 24 de abril, en el marco de la Cumbre Internacional sobre el Futuro de la Seguridad Energética.
Por su parte, el primer ministro británico, Keir Starmer, ha dialogado telefónicamente con otros líderes europeos, como el canciller alemán, Olaf Scholz, y su probable sucesor, Friedrich Merz, coincidiendo en que hemos entrado en una nueva era para la economía global. Starmer afirmó la necesidad de que Europa actúe con responsabilidad para minimizar el impacto en los trabajadores y colaborar con otros países para preservar una estabilidad económica general. Además, reiteró su decepción ante las nuevas medidas arancelarias y subrayó su intención de actuar en el interés nacional del Reino Unido mientras se preparan para afrontar todas las eventualidades.
Finalmente, enfatizó la importancia de que el Reino Unido, en este nuevo comienzo, fortalezca sus relaciones comerciales con otros países.