ACS ha informado de un incremento del 8,1% en su beneficio neto atribuible durante los primeros seis meses de 2025, alcanzando los 450 millones de euros en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este crecimiento ha sido principalmente impulsado por su filial estadounidense, Turner, que registró una espectacular subida del 64% en su beneficio neto, alcanzando los 227 millones de euros.
La notable evolución de Turner puede atribuirse al auge de sectores clave como centros de datos, salud, deportes y educación, además de la reciente contribución de Dornan Engineering, una firma irlandesa adquirida a fines de 2024. Sin embargo, no todas las filiales de ACS tuvieron el mismo rendimiento. Abertis mostró una caída del 7,7% en su contribución debido al nuevo impuesto en Francia, reportando 83 millones de euros, mientras que Iridium disminuyó un 1,5%, sumando 8 millones de euros.
Por otro lado, la filial australiana, Cimic, contribuyó con 101 millones de euros, experimentando un leve incremento del 1,7%, beneficiándose también de los sectores en crecimiento como los centros de datos y la infraestructura energética. Además, la división de Ingeniería y Construcción (que incluye Hochtief I&C, Dragados y Flatiron) añadió 83 millones de euros, lo que representa un aumento del 21,4%.
En conjunto, los ingresos del grupo ascendieron a 24.108 millones de euros, reflejando un incremento del 28,6%. El resultado bruto de explotación (Ebitda) también mostró un aumento significativo, situándose en 1.434 millones de euros, un 23,9% superior al primer semestre de 2024.
El beneficio neto ordinario, al excluir los resultados extraordinarios, se incrementó un 17%, superando los 392 millones de euros y, ajustado por el tipo de cambio, el beneficio neto mostró un alza del 9,9%. A finales de junio, ACS reportó una cartera valorada en 89.342 millones de euros, incrementada en un 3,1% (11,8% ajustada por tipo de cambio). Este crecimiento fue impulsado por un volumen de adjudicaciones superior a 31.700 millones de euros, destacando la construcción de infraestructuras de nueva generación, con especial foco en centros de datos.
Financieramente, ACS cerró el semestre con una deuda neta de 2.202 millones de euros, lo cual supone un aumento del 37%, debido principalmente a las inversiones en nuevos proyectos y a la devaluación del dólar frente al euro. El flujo de caja operativo neto en los últimos 12 meses superó los 1.620 millones de euros, destacando la sólida posición financiera de la compañía en un contexto de expansión estratégica.
