El presidente de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, ha anunciado este lunes que se espera un incremento de aproximadamente 20.000 nuevos autónomos en 2025. Este crecimiento está alineado con una proyección de aumento del 2% del PIB para el próximo año.
Amor ha indicado que, aunque se prevé un crecimiento en el empleo, este se está produciendo de manera desproporcionada en las grandes empresas, mientras las pequeñas empresas y los autónomos enfrentan desafíos significativos. Según sus declaraciones, «el 50% de los autónomos que cerraron 2024 lo hicieron sin obtener mejores resultados, lo que podría haber cambiado si se hubiera proporcionado un apoyo más sólido a las pequeñas empresas».
El autónomo necesita certidumbre, lo mismo que los inversores
Amor ha mencionado que el 25% del colectivo de autónomos ha atravesado momentos difíciles durante 2024. A pesar de que los datos generales de empleo reflejan un crecimiento, la realidad para los trabajadores por cuenta propia es preocupante. Están perdiendo posiciones en sectores tradicionales como el comercio, la hostelería, la industria y la agricultura.
Desde ATA, se anticipa un 2025 marcado por la incertidumbre para los autónomos. El Barómetro de ATA revela que tres de cada cuatro autónomos han experimentado un aumento en los costes financieros, de producción y energéticos. Amor lamentó que en España «cada día se pone una zancadilla al que genera empleo» y criticó la falta de avances en políticas como el IVA franquiciado, que todavía no ha sido implementado.
Con una mirada hacia el futuro, se prevé que las cifras de afiliación al RETA en 2025 queden por debajo de las actuales, como resultado del freno en la economía y la incertidumbre global. Moro concluyó que para fomentar un ambiente propicio para la inversión y el emprendimiento, es crucial reducir la regulación y superar las dificultades fiscales que enfrentan los autónomos, promoviendo así una política más favorable a la creación de empleo y la digitalización del colectivo.