El director financiero de Bankinter, Jacobo Díaz, ha indicado que la entidad podría volver a deducirse el impuesto a la banca en 2026, como ya se ha hecho con las cuentas de 2025. Esta afirmación tuvo lugar durante la reciente conferencia de analistas en la que acompañó a la consejera delegada, Gloria Ortiz, para presentar los resultados del primer trimestre.
En este contexto, el banco ha revelado que no ha contabilizado el pago del impuesto a la banca correspondiente a 2024 en sus cuentas del primer trimestre, a diferencia de años anteriores, donde este gravamen impactó en su desempeño financiero con un coste de 95 millones de euros en el mismo período del año anterior.
El nuevo diseño permite una deducción del 25% por el pago del impuesto de sociedades
Díaz explicó cómo ha evolucionado el gravamen desde su formulación inicial en 2022 hasta el nuevo modelo aprobado en noviembre de 2024. Este impuesto ha pasado de ser una prestación no tributaria a establecerse como un gravamen progresivo según los ingresos de la entidad. En el caso de Bankinter, el tipo impositivo se establece en 4,8%, con posibilidades de alcanzar hasta el 7% para las grandes entidades, mientras que para las más pequeñas el límite es del 1%.
Según las estimaciones del banco, el impacto del impuesto en 2025 se cifra en 54 millones de euros. Sin embargo, la nueva normativa posibilita deducir hasta 75 millones de euros por cualidades relacionadas con el impuesto de sociedades, amortiguando así el pago del gravamen.
De cara a 2026, Díaz espera que la situación se mantenga similar, con la expectativa de un crecimiento en los resultados de 2025 y un pago del impuesto a la banca que podría situarse «cerca de cero».
Por su parte, Gloria Ortiz ha expresado su satisfacción por los resultados del primer trimestre de 2025, donde Bankinter registró unas ganancias de 270 millones de euros, un incremento del 34,5% respecto al año anterior, impulsado por niveles de ingresos recurrentes y actividad comercial robusta en diversas áreas geográficas. Ortiz ha manifestado su confianza en poder repetir y superar el éxito de 2024, con un objetivo de alcanzar 1.000 millones de euros de beneficio neto anual.
A pesar de los altos niveles de volatilidad e incertidumbre en el mercado debido a los recientes anuncios de aranceles por parte de EE.UU., Bankinter ha afirmado que no ha sufrido impactos significativos en su negocio. La exposición de la entidad en su cartera crediticia a empresas exportadoras que operan con EE.UU. es del 1,4% del total del riesgo. Sin embargo, el banco ha notado un incremento en las transacciones en el bróker online, mientras los clientes han optado por refugiarse en fondos de menor riesgo.
Banca digital en Irlanda
Finalmente, Ortiz ha revelado que Bankinter tiene planes de lanzar depósitos en Irlanda durante el verano, tras completar su conversión a sucursal. La estrategia no será «agresiva» en la captación de depósitos, ya que el banco busca evaluar sus capacidades en este nuevo mercado. La intención es comenzar a financiar su crecimiento a largo plazo de manera local, considerando la posibilidad de establecer una banca digital de servicio total universal en Irlanda.
