Un total de veinticuatro preguntas ha respondido Peio Belausteguigoitia, Country Manager de BBVA, sobre las condiciones que impuso el Gobierno ayer para permitir la compra de Banco Sabadell. La conclusión es que en el banco no lo tienen claro, que el análisis que está realizando BBVA dará la respuesta sobre si siguen adelante, si recurren esta decisión a la Justicia o si se retiran.
Lo que sí se ha entendido más o menos claramente es que la entidad opta por realizar este análisis lo antes posible, de manera que adelanta que la decisión se conocerá "en las próximas fechas". Así lo ha dicho Belausteguigoitia durante su participación en los cursos de Economía que organiza APIE junto a la UIMP en Santander. Desde su punto de vista, la operación "es buena en el contexto que estamos viviendo" y "todo el mundo entiende el racional de crecimiento de esta operación", dice Belausteguigoitia.
Eso da una pista de que el banco preferiría continuar y, en cualquier caso, no dilatar el proceso más tiempo del necesario, como ya dijeron el lunes Carlos Torres, presidente del banco, así como Carlos San Basilio, presidente de la CNMV. "No tenemos ningún afán en retrasar este proceso", insiste el número 3 del banco.
No obstante, Belausteguigoitia recuerda que la CNMC ya impuso condiciones y que, desde su perspectiva, el banco solo contemplaba que el Gobierno las suavizara o mantuviera. En ese sentido, se pueden extraer dos interpretaciones: una, que consiste en que BBVA recurra esta decisión; y dos, que el banco opte por aceptar esas condiciones para que la compra se produzca cuanto antes.
Asimismo, en la opinión del banquero vasco, solamente se ha impuesto una condición, que es la de mantener el patrimonio separado, que Banco Sabadell tenga una gestión y una personalidad jurídica propia. A priori, se trata de tres condiciones distintas, a las que se añade la vigilancia del Gobierno para evitar despidos que pudieran estar relacionados con la OPA y no con motivos de negocio.
Liderar la consolidación
Por otro lado, desde el banco opinan que esta operación supondría una manera de liderar la consolidación bancaria en Europa. "Esta operación va encaminada a que España lidere operaciones de consolidación que son importantes para Europa y para el rol estratégico que tiene que tener Europa en este nuevo mundo", incide Belausteguigoitia.
En cuanto a las sinergias de la operación, que en gran parte podrían desaparecer si Banco Sabadell mantiene su propia gestión, Belausteguigoitia aclara que "la mayoría de las sinergias venían del ámbito tecnológico", es decir, de la integración de las plataformas tecnológicas. Así, existen vías abiertas para que BBVA y la que sería su filial exploren colaboraciones que promuevan su competitividad.
Por último, el Country Manager de BBVA ha sido preguntado si se le seguía viendo sentido a esta operación aunque se impidiera la fusión, como dijo el banco hace meses. Belausteguigoitia ha respondido "eso dijimos", pero no si esa opinión se mantiene, lo que deja entrever que BBVA podría seguir adelante pese a que no comparte que el Consejo de Ministros les haya impuesto estas nuevas condiciones.
En cualquier caso, subrayan sus intenciones de no extender el proceso más allá del tiempo necesario. Dicho de otro modo: los tiempos estarán marcados por la evaluación que está llevando a cabo BBVA.
