La Comisión Europea ha autorizado nuevamente una ayuda de 321 millones de euros destinada a la reestructuración de la aerolínea de vuelos chárter Condor, tras las significativas pérdidas que sufrió durante la pandemia. Esta decisión se produce después de que la Justicia europea anulara un anterior aval de Bruselas a este plan, lo que llevó al Ejecutivo comunitario a realizar una revisión exhaustiva de su legalidad.
La investigación sobre este asunto comenzó en julio de 2024, tras la anulación en mayo del mismo año por parte del Tribunal General de Justicia de la UE (TGUE) del visto bueno que Bruselas había concedido en julio de 2021, este último fue objeto de controversia por parte de la aerolínea Ryanair. El plan de ayuda se había concebido para asegurar la continuidad de Condor, que enfrenta serias dificultades tras la insolvencia de su antigua matriz, Thomas Cook.
En su fallo, el TGUE advirtió que la Comisión Europea debía analizar si Alemania había recibido suficientes ventajas, asegurando así que los antiguos accionistas y los titulares de deuda subordinada asumieran su parte de la carga de la reestructuración. Esto sería fundamental para reducir el importe de la ayuda y mitigar cualquier distorsión de la competencia. Como resultado de esta sentencia, se llevó a cabo una reevaluación de la medida y se concluyó que era conforme a las normativas de la UE sobre ayudas estatales.
La Comisión ha confirmado que Condor está implementando un paquete integral de medidas de reestructuración que garantizará su recuperación a largo plazo
Además, se destacó que Condor, junto a su nuevo inversor privado, Attestor, está contribuyendo significativamente al coste de la reestructuración, cubriendo más del 70%. La Comisión también subrayó que los accionistas existentes han perdido por completo el valor de su inversión, lo que indica un reparto adecuado de las cargas asociadas. Esto implica que la ayuda no presenta problemas de riesgo moral y asegura que Alemania se beneficiará de una parte apropiada de los posibles beneficios futuros.
Finalmente, la Comisión ha asegurado que esta ayuda incluye salvaguardias adecuadas para limitar el falseamiento de la competencia en el mercado interior, solidificando así el compromiso de la UE de mantener condiciones justas para todos los actores en el mercado.
