La junta general de accionistas de Tesla se reunirá el próximo jueves, 6 de noviembre, para abordar una propuesta que ha llamado la atención a nivel mundial: aprobar el bono del consejero delegado, Elon Musk, valorado en un billón de dólares (aproximadamente 850.500 millones de euros). El paquete salarial es calificado como uno de los mayores acuerdos de compensación para ejecutivos en la historia empresarial.
Este ambicioso bono se despliega en un plan a 10 años y requiere que Musk alcance ciertos hitos para recibir el pago completo. Se espera, por ejemplo, que impulse la expansión del negocio de robotaxi de Tesla y eleve el valor de mercado de la compañía a al menos 8,5 billones de dólares (7,2 billones de euros). Los incentivos buscan mantener a Musk focalizado en Tesla, a medida que extiende sus actividades hacia nuevas áreas como la robótica y la inteligencia artificial.
No obstante, la propuesta ha generado un intenso debate entre los accionistas, anticipando una posible oposición en la votación de este jueves.
Desafíos y requisitos del paquete salarial propuesto
Norges Bank Investment Management, el mayor fondo soberano de Noruega y el séptimo mayor accionista de Tesla, ha declarado su intención de votar en contra del bono. El fondo, que posee un 1,12% de participación en la compañía, ha expresado sus preocupaciones: «Si bien reconocemos el importante valor generado bajo el liderazgo visionario del Sr. Musk, nos preocupa el monto total del premio, la dilución y la falta de mitigación del riesgo asociado a la figura del director ejecutivo», afirmó la entidad.
Este fondo ya votó en contra de otros paquetes salariales a Musk en el 2018 y en el 2024
Además, la ‘proxy advisor’ internacional Glass Lewis también ha recomendado votar en contra del bono, mencionando sus inquietudes sobre la potencial dilución para los accionistas y cuestionando votaciones consultivas que Tesla planea sobre inversiones en inteligencia artificial.
Por otro lado, Tesla ha defendido el paquete salarial para Musk. La empresa calificó de «equivocadas» las opiniones de Glass Lewis, señalando que dichas recomendaciones subestiman los resultados financieros logrados bajo el liderazgo de Musk. Según Tesla, la recompensa está condicionada a logros extraordinarios que beneficiarían a los accionistas y resaltan que el futuro de Tesla sin Elon Musk no sería lo que los accionistas merecen.
«No hay ningún director ejecutivo que trabaje tan duro como Elon, y como accionista tienes la oportunidad de votar sobre el futuro de Tesla», afirmó el director financiero de Tesla, Vaibah Taneja


