Iberdrola celebrará su junta general ordinaria de accionistas el próximo 30 de mayo, en la que se someterán a votación varias propuestas clave. Entre ellas, está la reelección como consejeros independientes de Ángel Acebes y Juan Manuel González Serna, además de la ratificación y reelección de Ana Colonques García-Planas, quien fue nombrada el mes de diciembre pasado para cubrir la vacante dejada por María Helena Antolín Raybaud tras su renuncia por motivos personales.
Ana Colonques, licenciada en Administración y Dirección de Empresas por la Universidad Esade y heredera de Porcelanosa Grupo, ha sido parte de la filial Iberdrola España y actualmente dirige el área financiera de la firma azulejera. Por su parte, Ángel Acebes, quien fue ministro en el gobierno de José María Aznar, ocupa un puesto como consejero de Iberdrola desde 2012, marcando un retorno en 2020 después de su absolución relacionada con el caso de Bankia. Así mismo, González Serna, presidente del grupo Siro, ha estado vinculado a la compañía desde 2017, y aunque dejó su cargo de consejero coordinador, mantiene su rol como consejero y vicepresidente.
La compañía reafirma su voluntad de fomentar la participación de sus cientos de miles de accionistas
Iberdrola también propondrá mantener el número de consejeros en 14, conservando su actual estructura con 12 miembros externos, de los cuales el 92% son considerados independientes. En el ámbito financiero, la empresa planteará, por cuarto año consecutivo, un dividendo de involucración de 0,005 euros por acción, que se distribuirá a los accionistas que participen en la junta, siempre que se alcance un quórum del 70%.
La compañía llega a esta asamblea con un respaldo significativo de ISS y Glass Lewis, dos importantes asesores de voto que han recomendado a los accionistas votar a favor de todos los puntos del orden del día. Esta celebración se enmarca en un contexto de crecimiento, con los títulos de Iberdrola alcanzando máximos históricos y una capitalización superior a los 100.000 millones de euros, posicionándola como la primera eléctrica de Europa y una de las más grandes del mundo.
Además, la junta también incluirá la aprobación de los resultados del ejercicio anterior, donde la compañía invirtió 17.000 millones de euros y registró un beneficio neto récord de 5.612 millones. Iberdrola propondrá un dividendo complementario de 0,404 euros brutos por acción, que, sumando los 0,231 euros abonados en enero, totalizaría 0,635 euros por acción, lo que implica un incremento del 15% respecto al ejercicio pasado.
El orden del día también contempla modificaciones en los Estatutos Sociales y la actualización del Reglamento de la junta general de accionistas, con el objetivo de seguir promoviendo la transparencia y una gobernanza corporativa robusta y completa. De este modo, la compañía continúa su camino hacia un liderazgo responsable y participativo en el sector energético.
