En su discurso ante la junta general de accionistas de la compañía celebrada en Bilbao, el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, quien se unió a la compañía en 2001 como consejero delegado y vicepresidente ejecutivo, y fue nombrado presidente en 2006, resaltó la "visión", el "acierto" en su estrategia y la "excelente" ejecución que la empresa ha mostrado en las últimas décadas. "El viento sopla hoy en nuestra dirección", ha subrayado.
Galán, respaldado por los principales accionistas del grupo, incluyendo al máximo representante de Qatar Investment Authority (QIA), Sheikh Abdulla bin Mohammed bin Saud Al-Thani, que posee el 9% del capital de la energética, reafirmó el objetivo de alcanzar los 11.000 millones de euros en reparto de dividendos en los próximos tres años. Esto implicaría alcanzar entre 0,61 y 0,66 euros por acción, "un 20% más que el récord ya logrado este año".
El presidente de Iberdrola ha puesto en valor el "acierto" estratégico y la "visión" de la energética en las últimas décadas, que ha llevado al grupo a "valer 80.000 millones de euros, más que todas las energéticas españolas", y ha asegurado que "el viento sopla" a favor para seguir batiendo récords.
"Yo creo que tenemos que estar orgullosos, yo lo estoy, de que esta empresa esté en nuestro país. Si alguien me dice hace 24 años que esta empresa iba a valer 80.000 millones de euros... yo creo que muchos de los que estamos aquí o ninguno lo hubiéramos creído. Valemos 80.000 millones, valemos más que todas las energéticas españolas. Somos la mayor energética europea, valemos tres veces más que la siguiente energética española o cuatro veces más. Valemos más que bancos", afirmó.
"Creo que todas son razones por las que estar satisfechos y eso de alguna manera es lo que reflejan los informes de los analistas de los bancos de inversión en este momento sobre la compañía", añadió al respecto.
Asimismo, advirtió de que la electrificación, como "modo preferido para cubrir cada vez más usos energéticos por parte de millones de consumidores de todo el mundo", es un "proceso imparable" y ha asegurado que el grupo se encuentra "en la mejor situación para seguir poniendo en marcha el círculo virtuoso de crecimiento, fortaleza financiera y creación de valor".
Galán consideró que 2023 representó en el mundo "un verdadero punto de inflexión en el camino hacia una matriz energética menos dependiente de los combustibles fósiles", como quedó además rubricado en la última Cumbre del Clima (COP) de Dubai, y ratificó "el acierto de la estrategia" que puso en marcha Iberdrola hace ya más de dos décadas.
Así, el directivo indicó que el proceso de transición energética se verá rubricado en los próximos años con un crecimiento del consumo eléctrico en la industria de cerca de un 60% al horizonte de 2040, o en la movilidad sostenible, donde la demanda se multiplicará por cuatro a 2030 y casi por 20 a 2050.
Además, apuntó como la electricidad sustituirá "progresivamente" al petróleo, el carbón y el gas en la climaticación de edificios, hasta suponer en apenas 15 años más del 60% de ese consumo energético, tanto en Europa como en Estados Unidos, o jugará un papel clave en el procesamiento de datos y la gestión de las aplicaciones basadas en la nube, los llamados 'data centers', que representan "un proceso de crecimiento exponencial que continuará en los años siguientes".
Por ello, advirtió de que para dar servicio a toda esta demanda será necesario afrontar "grandísimas inversiones y una adecuada planificación de las redes eléctricas por parte de reguladores y operadores del sistema".
Para ello, destacó la nueva 'hoja de ruta' del grupo, presentada hace unos meses al mercado, y que prevé "la mayor inversión de la historia" de Iberdrola, con 41.000 millones de euros brutos en el periodo.
De este esfuerzo inversor, apuntó que Estados Unidos será su principal destino, con el 35% de las inversiones, seguido de Reino Unido (24%), la Península Ibérica y Latinoamérica (un 15% cada uno) y otros países de la Unión Europea donde está presente el grupo y Australia.