El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha declarado este martes que no tiene «ninguna intención de cesar» al presidente de la Reserva Federal estadounidense, Jerome Powell, a pesar de haber criticado su actuación y presionado públicamente para que se reduzcan los tipos de interés de manera más rápida.
Trump manifestó: «Ahora no tengo ninguna intención de cesarle. Me gustaría verle un poco más activo en cuanto a su idea de bajar los tipos de interés. Es un momento perfecto para hacerlo. Si no lo hace, ¿es el fin? No, pero sería un buen momento. Sería algo que podría haber tenido lugar antes, pero no, no tengo intención de destituirle».
Al ser interrogado sobre si tenía planes de retirar a Powell del cargo, el inquilino de la Casa Blanca aseguró durante un evento de juramentación del nuevo presidente de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC), Paul Atkins, que «nunca» ha tenido tales intenciones y añadió que «la prensa se sale siempre con la suya».
Previo a estas declaraciones, Trump intensificó la presión sobre Powell, argumentando que la tendencia de los precios de la energía y los alimentos atenúa los riesgos inflacionarios, mientras que la demora del banquero central en bajar los tipos de interés incrementa la probabilidad de desaceleración económica.
Trump arremetió contra el responsable de la política monetaria estadounidense al afirmar que «siempre llega demasiado tarde y se equivoca»
En el marco de este contexto, la semana pasada destacó en redes sociales que «el cese de Powell no puede esperar». Un día después, un portavoz de la Casa Blanca admitió que se estaba considerando su destitución, lo que añade una capa de incertidumbre a la relación entre Trump y la Reserva Federal.
