Indra convoca reunión extraordinaria para elegir nuevo presidente
Indra ha programado para este domingo una reunión extraordinaria de su consejo de administración, que se llevará a cabo alrededor de las 16:00 horas. En este cónclave se prevé que se designe a Ángel Escribano, actual consejero delegado de Escribano Mechanical & Engineering, como el nuevo presidente de la compañía, la principal empresa de defensa en España. Esta información ha sido confirmada por fuentes cercanas a Europa Press.
La reunión del consejo de Indra se produce menos de 24 horas después de que se anunciara que Marc Murtra asumirá el cargo de presidente de Telefónica, un cambio impulsado por el Gobierno a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), que posee un 10% de la operadora telefónica. Una vez concluya la deliberación del consejo sobre el futuro liderazgo, se notificará la decisión a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Perfil de Ángel Escribano y situación de Indra
Ángel Escribano es el consejero delegado de Escribano Mechanical & Engineering, una empresa de tecnología y defensa familiar presidida por su hermano, Javier Escribano. Esta compañía cuenta actualmente con un 14,3% del capital de Indra, convirtiéndola en el segundo mayor accionista, solo por detrás de la SEPI, que posee el 28%. EM&E se ha consolidado en el capital de Indra desde su primera adquisición en mayo de 2023, incrementando su participación de manera sostenida.
«Con la participación del 14,3% en Indra, el grupo EM&E consolida su compromiso con el fortalecimiento del tejido industrial español», explicó la empresa familiar a inicios de diciembre pasado.
La llegada de Ángel Escribano se da en un contexto de cambio y renovación dentro de la compañía, que debe actualizar a la mayoría de su consejo de administración y lidiar con importantes proyectos, como la posible venta de su filial principal, Minsait, y la adquisición de Hispasat. Además, Indra enfrenta retos con el Ministerio de Defensa relacionados con un contrato de gran envergadura para la producción de vehículos de combate, con un valor estimado de 2.000 millones de euros, y que ha sido motivo de preocupación debido a retrasos en su ejecución.
