El presidente del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), Álvaro López Barceló, ha manifestado la necesidad de reducir la carga normativa en la resolución de bancos, pero asegurando que no se comprometa la regulación financiera. Durante su intervención en la Comisión de Economía, Comercio y Transformación Digital del Congreso de los Diputados, López Barceló afirmó que hay margen para una «racionalización de las exigencias» y destacó la importancia de simplificar los procesos, sin perder de vista los objetivos de estabilidad financiera.
Gestión de crisis y plan de desinversión
El FROB, según López Barceló, ha estado trabajando «intensamente» en los últimos meses para asegurar la eficacia de las medidas de resolución durante situaciones de crisis. Se han simplificado los planes de resolución con el objetivo de aligerar la carga administrativa y enfocar recursos en nuevas prioridades.
Hoy estamos mejor preparados para afrontar problemas bancarios
Este trabajo incluye la realización de simulacros de resolución, uno con un gran banco en colaboración con instituciones como el Banco de España y el Banco Central Europeo, y otro con un banco menos significativo.
Durante su intervención, también se mencionó el mandato legal de Sareb, participada por el FROB, para transferir inmuebles a la Entidad Pública Empresarial de Suelo (Sepes). López Barceló explicó que hasta que Sareb entre en liquidación, se seguirá adecuando y cediendo inmuebles, así como desinvirtiendo una parte significativa de la cartera restante.
Evolución financiera de BFA
Con respecto a la evolución de BFA, sociedad propietaria de Bankia, López Barceló informó que la participación del FROB en CaixaBank tiene un valor neto contable de 8.962 millones de euros, lo que ha generado una reversión de 2.213 millones de euros en el deterioro de valor. No obstante, el FROB aún tiene contabilizado un costo de inversión en BFA de 19.604 millones de euros, lo que implica que el deterioro se mantiene en 10.642 millones de euros.
