Endesa ha reportado un beneficio neto de 1.888 millones de euros en 2024, lo que representa un notable incremento del 154% en comparación con los 742 millones de euros obtenidos en el ejercicio anterior. Este aumento se produce en un contexto donde Endesa estuvo afectada por un laudo desfavorable relacionado con un contrato de suministro de gas con Qatar, así como por la implementación del conocido como ‘impuestazo’ a las energéticas.
La compañía, dirigida por José Bogas, ha superado sus expectativas para el año, logrando un beneficio neto ordinario de 1.993 millones de euros en 2024, que implica un crecimiento del 110% en comparación con los 951 millones de euros del año anterior. El resultado bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 5.293 millones de euros, experimentando un incremento del 40% respecto al ejercicio anterior. Sin embargo, los ingresos totales reportados por la eléctrica disminuyeron, alcanzando los 21.307 millones de euros, lo que significa un descenso del 16% frente a 2023.
Endesa pulverizó así los objetivos fijados para el conjunto de 2024
Estos resultados fueron significativamente superiores a los objetivos marcados para el año, que preveían un Ebitda entre 4.900 y 5.200 millones de euros y un resultado ordinario neto de entre 1.600 y 1.700 millones de euros.
