Fitch ha comunicado recientemente que ha colocado el rating de emisor a largo plazo de BBVA en la zona de «revisión positiva», en el marco de la posible adquisición de Banco Sabadell. Esta decisión se produce tras la autorización de la operación por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC), que fue dada a conocer la semana pasada en fase 2 con compromisos.
Según Fitch, esta autorización «allana» el camino para la oferta pública de adquisición (OPA) que, de acuerdo con las previsiones de la agencia, podría lanzarse al finalizar el segundo trimestre de 2025 o principios del tercer trimestre de 2025. Este proceso dependerá de la posición que adopte el Gobierno español, el cual podría implementar medidas que van más allá de los aspectos puramente competitivos.
Con una tasa de aceptación mínima del 50,01% del capital social con derecho a voto, la adquisición podría resultar en una mejora de las calificaciones de BBVA
Fitch destaca que la fusión sería beneficiosa para BBVA, ya que incrementaría su presencia y exposición en el mercado español, fortaleciendo al mismo tiempo su perfil de negocio y financiación. En este sentido, la entidad combinada se convertiría en el segundo banco más grande de España, situándose cerca de CaixaBank. Asimismo, se espera que BBVA adquiera una exposición «más equilibrada» a los mercados desarrollados.
Por último, la agencia de calificación anticipa que BBVA mantendrá un «sólido beneficio operativo», a pesar de que los ingresos de Banco Sabadell sean comparativamente más bajos, asegurando además que los niveles de capital se mantendrán acorde con sus objetivos actuales.
