El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha lanzado una advertencia clara este jueves: un exceso de regulación puede empujar a las empresas españolas a buscar mejores oportunidades en países como Estados Unidos, Australia o Reino Unido, donde la seguridad jurídica es más sólida.
En el contexto del evento 'Summit Reinventing Spain 2024', organizado por Forbes en Madrid, Garamendi destacó la necesidad de unificar criterios regulatorios tanto en España como en la Unión Europea para poder competir eficazmente en un mercado global dominado por China y Estados Unidos. Además, subrayó la importancia de reforzar la colaboración público-privada para impulsar el crecimiento económico.
Durante su intervención, Garamendi insistió en la necesidad de reducir la carga regulatoria. Según el líder de la patronal, la "sobrecarga de normativas" no solo afecta a la competitividad de las empresas en España, sino que también tiene un impacto negativo en toda Europa. Para él, la clave está en contar con un marco regulatorio estable y predecible, que inspire confianza en los inversores y permita al sector privado desarrollarse. “La seguridad jurídica es imprescindible para atraer inversión”, reiteró.
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El impacto de la regulación en la inversión
Uno de los puntos fuertes de su discurso fue el señalamiento de que las inversiones españolas están migrando a otros mercados precisamente por esa falta de estabilidad jurídica en el país. "Competimos a nivel mundial, y el capital fluye hacia donde hay confianza", explicó Garamendi, añadiendo que los impuestos personalizados y los cambios regulatorios constantes están generando inseguridad en el ámbito empresarial.
Potenciar la industria y liderar la transformación digital
El presidente de la CEOE también enfatizó la relevancia de la industria en el panorama económico, especialmente en términos de innovación. “Más del 50% de la innovación proviene del sector industrial, por lo que debemos protegerlo y fomentarlo”, destacó. En línea con ello, subrayó que Europa debe decidir si desea ser un “parque temático” o liderar el futuro en materia de tecnología y transformación digital.
El rol de las empresas en la revolución digital
Garamendi puso el acento en que el sector empresarial debe estar al frente de la revolución digital, aunque también expresó su preocupación por la creciente intervención pública en estos procesos. Según él, la colaboración entre lo público y lo privado es fundamental, pero advirtió sobre el riesgo de una regulación excesiva que frene el avance.
En cuanto al futuro del empleo, Garamendi señaló la importancia de la energía limpia y la necesidad de adaptarse a la alta rotación de personal, lo que dificulta la creación de equipos sólidos en las empresas. “Hoy en día, son las personas las que buscan a las empresas, no al revés”, afirmó, destacando la necesidad de atraer y retener talento, especialmente en áreas relacionadas con las ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM).
Por último, Garamendi señaló que los 'objetivos 2030' son "de sentido común", y destacó la importancia de poner a las personas y al medioambiente en el centro de las decisiones