General Dynamics European Land Systems (GDELS), la división de vehículos blindados de la firma estadounidense con presencia en Europa, ha subrayado la españolidad de su sede en Madrid, así como la crucial función de sus vehículos militares en la garantía de seguridad de naciones en la frontera europea con Rusia, especialmente tras la invasión de Ucrania, que ha acelerado el rearme en la Unión Europea (UE). Fuentes de la empresa han resaltado en conversación con Europa Press la importancia estratégica de la sede madrileña, desde donde se supervisan y gestionan las operaciones en países como Suiza (Mowag), Austria (Steyr), Alemania (GDELS-Alemania), Rumanía (GDELS-Rumanía), Dinamarca y República Checa.
La empresa cuenta con aproximadamente 3.000 empleados en sus 15 centros a través de la UE, de los cuales casi un tercio (900) se encuentra en España. Además, más de la mitad de su equipo directivo es de nacionalidad española. Según las fuentes consultadas, GDELS factura alrededor de 1.300 millones de euros anuales y sostiene una cartera de pedidos cercana a los 3.500 millones de euros.
Desde España hemos enviado plataformas militares terrestres a destinos tan lejanos como Filipinas
Los vehículos de GDELS están siendo adquiridos por naciones limítrofes con Rusia, que confían en la tecnología española para su propia seguridad. Cabe destacar que incluso países tradicionalmente proteccionistas, como el Reino Unido, han optado por adquirir el modelo Ajax, desarrollado a partir de la plataforma Pizarro. Además, distintas variantes de los blindados utilizados en Estados Unidos y Canadá llevan el sello nacional, dado que se basan en el ‘Piraña’, cuya patente está registrada en España.
Estas afirmaciones se producen en un contexto de tensiones con Indra, la cual, junto a Santa Bárbara Sistemas, forma parte del consorcio Tess Defence, encargado de la fabricación del blindado 8×8 Dragón para el Ejército español. Recientemente, en una Comisión Mixta de Seguridad Nacional en el Congreso, el presidente de Indra, Ángel Escribano, criticó la gestión de Santa Bárbara Sistemas por parte de GDELS, afirmando que «no ha habido inversión» y que ha «destruido casi todo el tejido industrial» de lo que fue Santa Bárbara.
A pesar de estas críticas, GDELS emitió un comunicado donde afirma que ha invertido casi 500 millones de euros en Santa Bárbara Sistemas a lo largo de los últimos 15 años, incluyendo gastos de capital y desarrollo. El conflicto se intensificó tras el rechazo de GDELS a una oferta de Indra para adquirir la fábrica de Trubia, donde se produce el blindado 8×8 Dragón. Escribano también mencionó planes de Indra para adquirir otra planta en Gijón para la fabricación de vehículos militares, aunque no especificó detalles sobre la inversión ni sobre la planta en cuestión.
