Iberdrola ha alcanzado unas ganancias récord de 5.612 millones de euros en 2024, lo que representa un notable incremento del 17% en comparación con el ejercicio anterior. Este destacable resultado ha sido impulsado por inversiones históricas de 17.000 millones de euros realizadas durante el año, superando así la previsión de beneficios de la compañía de aproximadamente 5.500 millones de euros.
El beneficio neto ajustado de la eléctrica, presidida por Ignacio Sánchez, alcanzó los 5.530 millones de euros en el pasado año, mostrando un 15% de crecimiento respecto al beneficio neto reportado en 2023. Además, el resultado bruto de explotación (Ebitda) creció un 17% en 2024, alcanzando los 16.848 millones de euros. Este impulso se debe principalmente a los ingresos por la desinversión de activos de generación térmicos y a un sólido desempeño operativo, derivado de una mayor base de activos y mejores retornos en el negocio de redes, además de una mayor producción acompañada de precios más competitivos.
Las inversiones de la compañía energética sumaron un total de 11.946 millones de euros de forma orgánica, cifras que se consideran un récord para el grupo. A esta cifra se le añaden aproximadamente 5.000 millones de euros que se utilizaron en transacciones corporativas con ENW en el Reino Unido y Avangrid en Estados Unidos, las cuales fueron financiadas por la desinversión de activos de generación térmicos. Esta estrategia está alineada con el enfoque de Iberdrola de priorizar las redes y seleccionar proyectos en el ámbito de las energías renovables.
La empresa distribuye un total de 0,635 euros por acción con cargo a los resultados de 2024, logrando así anticipar su objetivo de retribución al accionista para 2026.
Ante estos resultados, el consejo de administración de Iberdrola propondrá a la junta general de accionistas una remuneración complementaria de 0,404 euros brutos por acción además del dividendo a cuenta de 0,231 euros brutos por acción abonado en enero. Esto refleja un incremento del 15% en el dividendo total, evidenciando el compromiso de la compañía con sus accionistas y el éxito de su modelo de negocio sostenible.
