Iberdrola ha dado un paso significativo hacia la electrificación con energías limpias en Brasil mediante su proyecto Noronha Verde, lanzado por su filial Neoenergía. Este proyecto ha sido reconocido como un hito importante en la Cumbre del Clima (COP30) en Belém, con el lema ‘Menos promesas, más acción’. Durante la presentación en la cumbre, el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, enfatizó el compromiso de la empresa con el futuro de Brasil, destacando casi 30 años de trayectoria en el país.
El proyecto Noronha Verde tiene como objetivo transformar a la isla Fernando de Noronha en un referente internacional de autosuficiencia y sostenibilidad. Este archipiélago, declarado patrimonio natural de la humanidad por la Unesco, será equipado con una innovadora planta solar flotante ubicada en el embalse de Xaréu. La planta, con una capacidad de 622 kWp, generará aproximadamente 1.083 MWh por año y evitará la emisión de 717 toneladas de CO2.
La sostenibilidad económica y medioambiental son plenamente compatibles y así lo demuestra la trayectoria de Iberdrola
Estas fueron las palabras de Galán en el panel sobre transición energética, donde subrayó que, aunque las inversiones en renovables están avanzando, es crucial fortalecer el almacenamiento energético y las redes eléctricas. Iberdrola planea invertir más de 7.000 millones de euros adicionales en Brasil, sumando a los 100.000 millones de reales ya invertidos en infraestructura durante las últimas tres décadas.
En colaboración con el Ministerio de Minas y Energía de Brasil y el gobierno de Pernambuco, Noronha Verde busca integrar energía solar y almacenamiento con baterías. La iniciativa se desarrolla bajo el programa Mais por Noronha de Neoenergía, con una inversión de 350 millones de reales, equivalente a más de 50 millones de euros. Se están instalando más de 30.000 paneles en una planta fotovoltaica con capacidad de 22 MWp, junto con un sistema de almacenamiento de 49 MWh.
Iberdrola, a través de Neoenergía, se ha consolidado como la mayor compañía eléctrica en Brasil, con presencia en 18 estados, 4.200 MW de capacidad instalada y servicios para cerca de 40 millones de personas. Galán destacó la importancia de la colaboración entre empresas y administraciones para avanzar hacia una acción climática efectiva y sostenible.
