La vendimia en el Marco de Jerez, en Cádiz, ha iniciado su cosecha con 12,7 millones de kilos de uva recogidos hasta la fecha. Este 2025, la campaña se caracteriza por una calidad superior del fruto, pero con una reducción estimada del 30% en comparación con 2024, un descenso atribuido al mildiu. Este hongo, que aflora en años lluviosos como el actual, ha influido significativamente en la producción.
El inicio de esta vendimia se postergó frente a años anteriores, cuando el calor aceleraba la maduración del fruto. Este año, las bodegas comenzaron alrededor del 4 de agosto en las zonas más interiores del territorio, al alcanzar la uva los 10,5 grados baumé, un indicativo mínimo de madurez. Desde entonces, la actividad se ha extendido a otros viñedos de la región. Cabe destacar que César Saldaña, presidente del Consejo Regulador de Vinos de Jerez y Manzanilla de Sanlúcar, había advertido sobre la disminución en la producción respecto a 2024, estimando unos 43 millones de kilos frente a los 62 millones del año anterior. Este descenso, sin embargo, no implicará una menor oferta de vino en el mercado, gracias al envejecimiento del producto en barricas mediante el sistema de soleras y criaderas, asegurando así las existencias necesarias.
Hasta el 13 de agosto, día del último registro por el Consejo Regulador, se han vendimiado 12,7 millones de kilos de uva en 20 lagares activos, 13 de estos en Jerez de la Frontera. En Chiclana de la Frontera y Rota, la vendimia aún no ha comenzado.
En Jerez, se han cosechado 10,4 millones de kilos para molturación. Trebujena ha aportado 1,3 millones, y Chipiona, 655.000 kilos. Sanlúcar, conocida por su manzanilla, ha molturado 238.000 kilos, mientras que Lebrija y El Puerto han registrado 37.000 y 14.000 kilos, respectivamente. Estos datos reflejan el reparto actual de la vendimia en la provincia, subrayando tanto la diversidad como la importancia económica de cada localidad en el sector vitivinícola de la región.
