En un movimiento estratégico que refuerza su presencia internacional, Rovi ha suscrito un contrato de compraventa con Bristol Myers Squibb (BMS) para adquirir una planta de fabricación de medicamentos en Phoenix, Arizona. Esta operación incluye una serie de activos y pasivos relacionados, según informó la compañía española a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) este lunes.
El acuerdo entre Rovi y BMS también incluye un ‘Toll Manufacturing Agreement’, mediante el cual Rovi continuará fabricando para BMS en la planta estadounidense. Este contrato, que tiene una duración inicial de cinco años desde el cierre de la operación, establece un pago mínimo de 50 millones de dólares (46,5 millones de euros) por cada año de vigencia.
La adquisición, cuyo importe es calificado como «no significativo» para Rovi, está condicionada al cumplimiento de ciertas condiciones suspensivas comunes en este tipo de operaciones. Se espera que el cierre de esta transacción ocurra en el primer semestre de 2026.
Con esta operación, Rovi no solo incrementa su capacidad de producción de inyectables, sino que también refuerza sus alianzas y asegura el suministro continuo de medicamentos
Además, la adquisición de esta instalación de última generación representa un importante paso en la expansión de la red de fabricación de Rovi. La empresa tiene previsto celebrar una reunión virtual con analistas e inversores este martes, 30 de septiembre, para detallar los aspectos de la transacción.
Como parte del proceso, William Blair ha actuado como asesor financiero exclusivo de Bristol Myers Squibb, destacando la importancia estratégica de esta transacción en el contexto de la industria farmacéutica.
