La llegada del mes de diciembre trae consigo una de las tradiciones más esperadas por miles de trabajadores en España: las cestas de Navidad. Entre todas las empresas que reparten estos obsequios anualmente, pocas generan tanta expectación y conversación como Inditex, el gigante textil fundado por Amancio Ortega y actualmente presidido por su hija, Marta Ortega. La cesta de esta compañía se ha convertido en un fenómeno viral en redes sociales, no solo por su generoso valor económico, que supera los 200 euros, sino también por la cuidada selección de productos gourmet, detalles personalizados y sorpresas que hacen que cada año los empleados y el público en general hablen de ella.
En plataformas como TikTok, se ha instaurado la tradición de compartir los "unboxings" de estas cestas, donde los empleados muestran paso a paso su contenido. Este 2025, una de las primeras en publicar su vídeo fue una trabajadora con 21 años de trayectoria en la empresa, cuya publicación rápidamente acumuló miles de visualizaciones. Los comentarios en la red social no tardaron en llegar, expresando sorpresa, admiración e incluso un poco de envidia por la generosidad de la compañía.
El primer detalle que captó la atención de los usuarios fue un adorable adorno navideño para el árbol: un pequeño ratón vestido con jersey invernal y peto, que se ha convertido en un símbolo informal de estas cestas y en la antesala perfecta para descubrir los demás productos. Junto a este peluche, los empleados encontraron una caja conmemorativa por el 50 aniversario de Zara, que incluía una tableta de chocolate con nueces y una carta firmada por Marta Ortega. El mensaje, breve pero emotivo, agradecía el compromiso de la plantilla durante todo el año y muchos trabajadores no dudaron en mostrarlo frente a la cámara, celebrando este gesto cercano y personal de la directiva.
El resto del contenido no dejó indiferente a nadie. Presentada en una elegante caja de rayas rojas y blancas con el mensaje “Best Wishes”, la cesta incluía una amplia selección de productos gourmet. Entre ellos, una botella de champán, vino tinto de Marqués de Riscal, vino blanco verdejo, aceite de oliva virgen extra ecológico, quesos semicurados, chorizo y salchichón ibérico de bellota. También se incorporaban conservas de alta calidad, como sardinas, mejillones en escabeche, portobello al ajillo y un bote de setas variadas.
Los dulces volvieron a ser protagonistas, con moscovitas, polvorones y turrones artesanales de la marca Picó, disponibles en sus variedades blando, duro y chocolate. Se sumaban galletas de nata, nueces, una tableta de chocolate con nueces y los exclusivos bombones de pistacho del restaurante Retiro da Costiña, con dos Estrellas Michelin. Este año, una de las novedades más celebradas fue el hummus de la empresa gallega Calabizo, que sorprendió a muchos empleados. No podía faltar tampoco el icónico pollo en lata de Galo Celta, un producto que el año pasado generó gran curiosidad en redes y que se ha consolidado como imprescindible en cada edición.
Para completar la experiencia, la cesta incluía un mantel navideño presentado en forma de saco, pensado para decorar las mesas durante las celebraciones. Este detalle, más allá de su funcionalidad, refuerza el cuidado estético y el concepto de celebración que Inditex busca transmitir a sus empleados.
En redes sociales, la reacción de los usuarios no se hizo esperar. Muchos alabaron el mimo con el que se cuidan los detalles y la generosidad de la compañía, mientras que otros señalaron que no todos los trabajadores reciben la cesta, lo que también generó debate. Sin embargo, cada año la cesta se convierte en una de las más codiciadas de la temporada, tanto por su valor económico como por la calidad de los productos seleccionados, consolidándose como una de las tradiciones corporativas más emblemáticas de España.


