Enrique Pizarro Guijarro es el fundador y actual director general de Klinikare. Especialista en tecnología sanitaria y transformación digital, cuenta con más de 15 años de experiencia diseñando soluciones innovadoras para el ámbito clínico. Su formación en Dirección y Gestión de Empresas de Salud le ha permitido integrar una visión estratégica con un conocimiento profundo de los retos operativos en el sector.
Antes de fundar Klinikare, Pizarro trabajó en consultoría tecnológica y desarrollo de software para entornos médicos, donde identificó de primera mano la necesidad de una solución integral que conectara los distintos actores del sector salud de forma segura, eficiente y escalable. Esa visión fue el origen de Klinikare.
Háblenos sobre su trayectoria profesional y su faceta como emprendedor…
Mi carrera siempre ha estado vinculada a la tecnología aplicada a la salud. Comencé trabajando en proyectos de digitalización para clínicas y universidades cuando todavía pocos hablaban de gestión en la nube. En aquel momento era evidente que el sector sanitario necesitaba herramientas más ágiles, seguras y adaptadas a su operativa diaria.
De esa necesidad nació Gestiona, el primer programa de gestión en la nube para clínicas odontológicas en España. Esa experiencia nos permitió entender de primera mano los retos del día a día de los profesionales y fue el germen de Klinikare, que hoy se ha convertido en una plataforma integral para todo el ecosistema de la salud: clínicas de cualquier especialidad, universidades y laboratorios.
Siempre he entendido el emprendimiento como una forma de resolver problemas reales. Y, en nuestro caso, el objetivo ha sido claro desde el principio: liberar tiempo a los equipos clínicos y aportarles estabilidad tecnológica para que puedan centrarse en lo importante, que es la atención al paciente.
Su último proyecto es Klinikare. ¿Cómo surgió la idea?
Klinikare surge de escuchar a nuestros clientes durante años. Muchos profesionales nos pedían una herramienta que no solo gestionara citas o facturación, sino que integrara todo el flujo de información entre pacientes, doctores, universidades y laboratorios.
Decidimos crear una plataforma SaaS (Software as a Service) accesible desde cualquier dispositivo y con un enfoque mucho más global: conectar el conocimiento y la gestión clínica bajo un mismo entorno. La idea era sencilla pero ambiciosa: unificar todos los procesos -desde la cita hasta la firma digital o la financiación del paciente- en una sola solución, segura, ágil y sin dependencias locales.
Hoy, Klinikare es una plataforma de servicios digitales del sector salud, pionera en inteligencia artificial, que permite a las organizaciones ahorrar tiempo, reducir errores y trabajar de forma más eficiente y conectada.
¿Cuál es el modelo de negocio de Klinikare y en qué se diferencia de otras soluciones existentes?
Nuestro modelo se basa en ofrecer una plataforma integral. Las clínicas, universidades o laboratorios acceden a todos los servicios mediante suscripción, sin necesidad de instalaciones ni inversiones en servidores.
Pero la diferencia real no está solo en la tecnología, sino en la filosofía. En Klinikare no vendemos licencias: construimos relaciones de largo plazo. Acompañamos al cliente con soporte continuo, formación adaptada y actualizaciones constantes. Además, contamos con un ecosistema modular abierto, lo que permite utilizar funciones específicas incluso si el cliente mantiene otro software.
No vendemos software: acompañamos a las clínicas en su transformación digital
¿Qué papel juega la tecnología en su propuesta de valor?
Es el corazón del proyecto. Klinikare fue pionera en cloud y lleva más de seis años integrando inteligencia artificial (IA) en el entorno clínico. Primero la aplicamos al análisis de imágenes médicas y, más tarde, a procesos de lenguaje natural que hoy utilizamos en nuestro Asistente de Recepción con IA para pacientes y en el Soporte Técnico 24/7 para nuestros clientes.
La tecnología nos permite ofrecer una gestión sin interrupciones, con tiempos de respuesta mínimos y total trazabilidad de los datos. Operamos en la infraestructura de Amazon Web Services (AWS) con autoescalado, balanceo de carga y backups automáticos; y la seguridad está auditada con estándares ISO 27001. Pero no se trata solo de innovar, sino de hacerlo con propósito: que cada mejora tenga un impacto directo en la productividad de las clínicas, en la experiencia del paciente y en la tranquilidad del equipo médico.
¿Qué opina sobre el ecosistema emprendedor en España?
España cuenta con talento y una comunidad emprendedora muy viva, pero aún falta una cultura de escala. Hay ideas brillantes que se quedan en fase piloto por falta de financiación o por la burocracia que frena la agilidad empresarial. En el ámbito sanitario, el reto es mayor porque confluyen la innovación tecnológica y la regulación. Aun así, el sector está avanzando: hoy vemos más colaboración entre startups, universidades y grandes grupos clínicos. Proyectos como el nuestro con la Universidad de Granada o la Universidad Alfonso X El Sabio son un buen ejemplo de esa sinergia.
¿Qué consejos daría a quienes quieren emprender un negocio?
Primero, que entiendan profundamente el problema que quieren resolver. El mercado no premia las ideas geniales, sino las útiles. Segundo, que no subestimen la importancia del equipo. Un buen proyecto solo prospera si hay personas comprometidas detrás. Y, por último, que sean constantes. En Klinikare llevamos más de 15 años evolucionando sin dejar de aprender. La perseverancia y la escucha activa del cliente son las que permiten construir algo sólido.
¿Cuáles han sido los principales obstáculos a la hora de emprender?
El primero fue convencer al sector sanitario de confiar en la nube. Hoy parece obvio, pero hace una década costaba explicar que un sistema cloud era más seguro que un servidor local. El segundo, ha sido mantener la calidad del servicio mientras crecemos. Atendemos a miles de usuarios y cada implantación requiere acompañamiento personalizado. Por eso desarrollamos el Método Klinikare, un proceso estructurado de implantación, migración completa de datos y formación certificada que garantiza que ninguna clínica queda sola durante el cambio.
Y el tercero, como en cualquier empresa tecnológica, ha sido anticiparnos a los cambios normativos: RGPD, Ley Antifraude, TicketBAI… No esperamos a que lleguen; los integramos por adelantado para que nuestros clientes siempre estén preparados.
¿Qué pediría a las administraciones para apoyar el emprendimiento?
Más estabilidad normativa y un entorno que incentive la innovación. Las empresas no necesitan subvenciones, sino seguridad jurídica y procesos menos burocráticos para poder escalar. También sería positivo que se fomentaran proyectos conjuntos entre universidad y empresa privada, algo que en otros países europeos funciona muy bien. La transferencia real de conocimiento impulsaría tanto la investigación como el desarrollo tecnológico aplicado al mercado.
Las empresas no necesitan subvenciones, sino seguridad jurídica y procesos menos burocráticos para poder escalar
¿Cuál es su máxima cuando vienen malos tiempos?
Volver al propósito y recordar por qué hacemos lo que hacemos. Los momentos difíciles se superan manteniendo el foco en aportar valor. En nuestro caso, eso significa garantizar que las clínicas sigan operativas, los pacientes bien atendidos y los equipos tranquilos.
El futuro de la gestión será digital, conectado e inteligente
¿Cómo definiría su visión de futuro en una sola frase?
El futuro de la gestión será digital, conectado e inteligente… y Klinikare ya está ahí.
