Las campañas de marketing que utilizan las empresas son cada vez más diversas. No es de extrañar que frente al uso de técnicas tradicionales como la publicidad en televisión o radio, costosa y no siempre efectiva, cada día crezca más la venta de regalos de empresa. Cada vez hay más compañías que se decantan por ofrecer artículos publicitarios que les ayudan no solo a captar nuevos clientes, sino además a fidelizar a los que ya tienen. Tal es así que según un análisis estadístico de Giving Europe las ventas de artículos publicitarios han aumentado un 3,5% en la primera mitad de 2016 respeto el mismo periodo del año anterior. Y el área del sur de Europa es la que ha registrado un mayor aumento. Parece ser pues, que las empresas han encontrado en estos productos una buena forma de promocionarse.
Una de las razones que explica el auge de estas estrategias es la relación coste-efectividad. El hecho es que a menudo estas campañas son baratas comparadas con otras estrategias de marketing más tradicionales, como puede ser la publicidad en la televisión o en otros medios, y suelen tener buenos resultados. Según un informe de la Promotional Products Association International (PPAI) los consumidores son más favorables a realizar una compra después de haber recibido uno de estos productos promocionales (20,9%) en comparación a cuando ven este producto en publicidad impresa (13,4%), en la televisión (7,1%) o en alguna página web (4,6%).
Según este mismo estudio ofrecer uno de estos regalos de empresa provoca que las personas tengan una mejor imagen de la empresa que si ven el producto por la tele o en Internet. La diferencia es importante y por eso en relación al coste muchas empresas han decidido escoger esta estrategia.
Pero, ¿qué son regalos de empresa? Las empresas han empezado a ofrecer todo tipo de productos personalizados que dan notoriedad a la marca, pero a la vez que son útiles para las personas. Se trata de productos que suelen ser útiles para el uso cotidiano y que por tanto acompañan a los clientes o potenciales clientes durante su día a día. Se trata por ejemplo de bolígrafos personalizados, bolsas publicitarias, como es el caso de las bolsas promocionales de Pompadour, libretas, lápices de memoria, paraguas o mochilas entre otro tipo de artículos que no suelen pasar de moda y que se pueden usar durante nuestro día a día.
De hecho según la PPAI el 94% de los consumidores recuerda algún regalo promocional recibido en los dos últimos años y de estos casi un 90% recuerda la marca detrás de estos regalos. Además, según el mismo estudio a más de un 80% de ellos les gusta los regalos que recibieron y a la mitad de estos les gustaría recibir otro. Los resultados hacen pues que cada vez más empresas vean con buenos ojos esta estrategia de marketing como una forma de promoción de la empresa y para el crecimiento y la expansión de la marca.
Los regalos promocionales son un buen elemento para tener preparado cuando la empresa tiene pensado llevar a cabo alguna acción promocional, como puede ser participar en un evento o feria. Allí es donde puede ser muy interesante ofrecer estos regalos para que las personas que se hayan acercado a nuestro estante se vayan a casa con algún objeto que usen después y que lleve impregnado nuestro logo.
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