Santiago Niño-Becerra

Capital entrevista al economista Santiago Niño-Becerra, quien analiza el presente y el futuro de la economía española En medio de un ambiente electoral perpetuo, el corto plazo y las consignas políticas inundan la conversación pública. El catedrático de Estructura Económica y conferenciante de Thinking Heads, Santiago Niño-Becerra, analiza el futuro económico inmediato de España, así como el más lejano, por medio de su libro “Futuro, ¿qué futuro?”. En esta entrevista con Capital, Niño-Becerra plantea varias de las prioridades que, a su juicio, deberían instalarse en la política económica española.  ¿Cree usted que se ha hablado poco de propuestas de cara a las elecciones? Que se ha hablado más, por ejemplo, de las compañías que tendrán unos y otros si llegan al poder.  Y del pasado. Hay una cosa que está muy clara y es que, independientemente del color o de los rostros de quienes integren el Gobierno, Bruselas va a poner unos deberes, que de hecho ya los ha puesto, y, sea quien sea, lo va a tener que hacer. Porque si no va a tener consecuencias, desde los fondos europeos hasta la pérdida de imagen en los mercados de capitales. No hay que olvidar que la economía española es el 10% de la Unión Europea.   Lo que veo es que hay mucha preocupación por quiénes van a estar, dónde van a estar, etcétera, pero de economía, que es de lo que yo hablo, el futuro está muy hipotecado ya. El problema vendrá después. Quien esté en el Gobierno tendrá que explicar lo que tiene que hacer porque Bruselas le dice que tiene que hacerlo. Lo que no se me ocurre es cómo lo va a vender.   Por desgracia, estamos acostumbrados a que lo que se dice en campaña luego no se cumple...  En este caso es aún peor, porque…