Las criptomonedas han comenzado la semana con números rojos. Este lunes, 7 de abril de 2025, las principales divisas digitales están registrando fuertes caídas, en línea con el retroceso generalizado de los mercados financieros globales. El temor a una nueva guerra comercial entre Estados Unidos y China ha desatado una oleada de ventas que no ha dejado indemne al mercado cripto.
Bitcoin cae por debajo de los 77.000 dólares
El activo digital más valioso, Bitcoin (BTC), ha retrocedido hasta los 76.700 dólares, lo que supone una caída superior al 7% en apenas 24 horas. La corrección rompe así con la tendencia alcista que lo había llevado a superar los 80.000 dólares por primera vez en su historia a finales de marzo.
Entre los factores que explican esta caída figuran la creciente aversión al riesgo provocada por el repunte en las tensiones geopolíticas. Por otro lado, hay que tener en cuenta la retirada parcial de capitales institucionales tras semanas de subidas. Asimismo, los rumores sobre nueva regulación en Estados Unidos y Europa tampoco ayudan.
Ethereum y Solana tampoco se salvan
Ethereum (ETH), la segunda criptomoneda por capitalización, también registra pérdidas significativas. Su precio ronda los 3.800 dólares, tras haber rozado los 4.100 hace apenas unos días. Por su parte, Solana (SOL), uno de los activos con mejor desempeño en el primer trimestre del año, cae casi un 14% desde el 3 de abril.
Una corrección esperada, pero que genera dudas
A pesar del impacto, algunos analistas ven esta corrección como una toma de beneficios saludable tras las fuertes revalorizaciones vividas desde enero. Sin embargo, otros alertan de que si Bitcoin perfora el soporte de los 75.000 dólares, el retroceso podría profundizarse hasta niveles cercanos a los 68.000 o incluso 65.000.
Mientras tanto, otras criptos como Cardano (ADA), Ripple (XRP) y Dogecoin (DOGE) también acumulan pérdidas de entre el 6% y el 10% en la sesión de hoy.
¿Oportunidad o inicio de una tendencia bajista?
La gran pregunta para los inversores es si estamos ante una simple corrección puntual o el inicio de un ciclo bajista en el ecosistema cripto. La respuesta dependerá en buena parte del comportamiento del mercado tradicional, la evolución del conflicto comercial y las decisiones que adopten los grandes reguladores.