El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha dado un paso crucial al iniciar la fase de audiencia pública de su propuesta de desarrollo de la red de transporte de energía eléctrica con horizonte 2030. Este plan contempla una inversión estimada de unos 13.600 millones de euros destinados a reforzar las redes eléctricas nacionales hasta el final de la década. Esta estrategia se alinea con los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2023-2030 (PNIEC) y pone especial énfasis en la atención a proyectos industriales prioritarios. La consulta pública se mantendrá hasta el 16 de noviembre, permitiendo a los interesados presentar sus puntos de vista y contribuciones.
Un enfoque renovado hacia el consumo de energía limpia
El Ministerio destaca que, si bien anteriores planificaciones se centraron en la incorporación de energía renovable en el sistema eléctrico, la nueva propuesta prioriza el consumo de energía limpia y competitiva dentro de proyectos industriales. La demanda prevista en el sistema peninsular se estima en 375 teravatios hora (TWh), marcando una diferencia notable respecto al escenario del PNIEC.
La estructura de inversión se divide en tres categorías principales que abarcan el 65% del total de recursos financieros, con unos 8.840 millones de euros dedicados a:
- Reforzar las redes para promover la electrificación y la integración de renovables.
- Aumentar la cohesión territorial mediante nuevos enlaces entre sistemas.
- Soportar la red de distribución y conectar nuevos consumos asociados a la electrificación y digitalización.
En palabras del sumario ejecutivo de la propuesta, "en este escenario se han incorporado aproximadamente un 25% de las propuestas de demanda recibidas tanto en la red de transporte como en la red de distribución".
Además, el plan prevé la integración de 159 GW de energía renovable y más de 22 GW de capacidad de almacenamiento. Sin las mejoras de red previstas, el sistema solo podría atender a 3.200 GWh anuales de nuevas demandas asociadas a la transición energética.
Reducción de costes y exigencias futuras
Uno de los aspectos más destacados del plan es la medida en que podría reducir los costes de suministro eléctrico, gracias a las modificaciones previstas en 9.500 kilómetros de líneas y con una inversión superior a 4.440 millones de euros. Las interconexiones internacionales y la ampliación de la red contribuirán significativamente a este objetivo.
El gobierno estima que la planificación "aporta un beneficio al conjunto de la sociedad mediante la reducción de las restricciones técnicas y la garantía de la sostenibilidad económico-financiera del sistema eléctrico".
De cara al futuro más allá de 2030, se han identificado nuevas necesidades, entre las que destacan dos interconexiones adicionales con Francia, apoyos a la red de distribución en varias zonas de Madrid y la conexión submarina entre las islas de Gran Canaria y Fuerteventura. Además, se requerirán refuerzos para alimentar infraestructuras estratégicas de la futura red de hidrógeno.
El gabinete liderado por Sara Aagesen subraya que esta propuesta se ha desarrollado con la cooperación de distintos agentes y comunidades autónomas. Por primera vez, se realizaron reuniones antes de la audiencia pública para integrar eficazmente las demandas de generación y consumo, centrándose en proyectos sólidos y viables.
