El mercado de segunda mano en Europa ha experimentado un crecimiento acelerado en los últimos años, impulsado por una combinación de factores económicos, ambientales y sociales. La crisis económica derivada de la pandemia de COVID-19 y la creciente conciencia ambiental entre los consumidores han sido motores clave de este auge, que ha transformado la percepción de los productos usados, llevándolos de un nicho de mercado a una corriente principal.
Un mercado en auge
El mercado europeo de segunda mano, particularmente en el sector de la moda, proyecta crecer un 15% anual hasta 2027, superando incluso el crecimiento del retail tradicional. Este aumento está liderado por las nuevas generaciones, especialmente los millennials y la Generación Z, quienes han adoptado la compra de segunda mano como una forma de acceder a productos de calidad a precios más asequibles. Un informe de ThredUp estima que, para 2030, uno de cada cinco artículos de ropa en los armarios europeos será de segunda mano.
En 2024, la Unión Europea reforzó su compromiso con la sostenibilidad al implementar políticas que promueven la economía circular. Esto incluye la extensión de la vida útil de los productos, el reciclaje y la reutilización, lo que ha dado un fuerte impulso al mercado de segunda mano. Países como Francia han liderado estas iniciativas, con legislaciones que obligan a las empresas a tomar responsabilidad por el ciclo de vida de sus productos, incentivando la reventa y el reciclaje.
Los consumidores europeos han mostrado un cambio notable en sus hábitos de compra. Según datos recientes de informes de ThredUp, BEUC o McKinsey & Company, el 65% de los compradores en Europa considera que la sostenibilidad es un factor clave en sus decisiones de compra, y más del 50% ha comprado algún producto de segunda mano en el último año. La moda de segunda mano se ha convertido en una alternativa atractiva no solo por razones económicas, sino también por la exclusividad y el carácter único de las prendas disponibles.
En el Reino Unido, por ejemplo, la plataforma de reventa de moda Depop ha visto un crecimiento explosivo, especialmente entre los jóvenes, con más de 30 millones de usuarios registrados. Este mercado se ha diversificado, abarcando desde ropa y accesorios hasta muebles y dispositivos electrónicos, demostrando que la segunda mano está lejos de ser una moda pasajera.
Un gran impacto ambiental
El impacto ambiental de la moda de segunda mano es significativo. La producción de ropa nueva consume enormes cantidades de recursos naturales, incluidos miles de litros de agua y grandes cantidades de energía, además de generar una gran cantidad de emisiones de CO₂. Al optar por productos de segunda mano, los consumidores europeos están ayudando a reducir este impacto. Se estima que, en 2023, la compra de ropa de segunda mano en Europa evitó la emisión de más de 700.000 toneladas de CO₂, y ahorró más de 150 millones de metros cúbicos de agua.
Este compromiso con la sostenibilidad ha llevado a que más marcas de lujo y de moda rápida como H&M y Zara se involucren en el mercado de reventa, ampliando las opciones disponibles para los consumidores.
Zara irrumpe en el negocio de la venta de ropa de segunda mano
Además, la moda de segunda mano está creando oportunidades económicas y sociales. En muchos países europeos, ha surgido un ecosistema de pequeñas empresas y emprendedores que se dedican a la reventa y el reciclaje de productos, generando empleo y promoviendo prácticas de consumo más responsables. Países como Alemania y Suecia han visto un aumento en las tiendas de segunda mano físicas y en línea, lo que también ha contribuido a revitalizar comunidades locales y fomentar la economía circular.
La falsificación, una gran preocupación
A pesar de su crecimiento, el mercado de segunda mano en Europa enfrenta varios desafíos. La calidad y la autenticidad de los productos, especialmente en el sector de lujo, son preocupaciones constantes. Las plataformas de reventa están invirtiendo en tecnologías como la inteligencia artificial y blockchain para garantizar la autenticidad y la trazabilidad de los productos, lo que podría consolidar aún más la confianza del consumidor en este mercado.
El futuro de la segunda mano en Europa parece prometedor. Con un creciente apoyo gubernamental, una mayor conciencia pública sobre la sostenibilidad y un mercado en expansión, es probable que el mercado de segunda mano continúe su ascenso, no solo en la moda, sino en una amplia gama de productos, desde tecnología hasta muebles y electrodomésticos.
En resumen, el mercado de segunda mano en Europa no solo está creciendo a un ritmo notable, sino que también está cambiando la forma en que los consumidores perciben el consumo y la sostenibilidad. Con un impacto positivo tanto en el medio ambiente como en la economía, esta tendencia tiene el potencial de redefinir el futuro del consumo en el continente.
Situación del mercado de segunda mano en España
El sector de la moda de segunda mano es uno de los que más ha crecido en España. Según un informe de ThredUp, el mercado global de segunda mano se está expandiendo rápidamente, y España no es una excepción. En los últimos cinco años, la demanda de ropa usada ha aumentado considerablemente, con una tasa de crecimiento anual que supera el 20%. Esto está en línea con las tendencias europeas, donde se proyecta que el mercado de segunda mano continuará creciendo a un ritmo acelerado.
Un estudio reciente realizado por Wallapop, una de las principales plataformas de compraventa de segunda mano en España, revela que la mayoría de los usuarios considera que la sostenibilidad es una razón importante para optar por productos usados. Esta tendencia se ha visto reflejada en el aumento del número de transacciones y en el crecimiento de la base de usuarios de la plataforma, que en 2023 superó los 15 millones de usuarios activos.
El gobierno español también ha comenzado a reconocer la importancia del mercado de segunda mano como parte de la economía circular. En 2021, España implementó una nueva ley de residuos que promueve la reutilización y el reciclaje, lo que ha incentivado aún más el crecimiento de este sector. Además, se han lanzado campañas de concienciación para promover la compra de productos usados como una forma de reducir el desperdicio y el consumo excesivo.
España está experimentando un auge en el mercado de segunda mano, impulsado por la necesidad de ahorro, la conciencia ambiental y el apoyo gubernamental. Este crecimiento no solo está transformando la forma en que los españoles consumen, sino que también está contribuyendo a un futuro más sostenible.
Otros datos
Los partnerships de Mangopay con estas plataformas proporcionan datos que no solo destacan las tendencias actuales, sino que también anticipan áreas potenciales de crecimiento. Entre los resultados más relevantes que se han identificado a partir de estos datos se encuentran los siguientes:
- Incremento sustancial en las transacciones en marketplaces C2C: entre el primer semestre de 2021 y el mismo periodo de 2024, las operaciones de artículos de segunda mano gestionadas por Mangopay experimentaron un aumento del 88%.
- Aumento en el volumen de ventas: el valor total de las ventas de productos de segunda mano creció un 91% durante el mismo periodo. Este incremento refleja una tendencia creciente hacia una economía circular y sostenible.
- Comparación de ventas de productos nuevos: mientras que las ventas de productos nuevos disminuyeron en cantidad un 12%, el valor monetario mostró un ligero incremento del 9%. Esto sugiere que, aunque los consumidores están comprando menos productos nuevos, están dispuestos a invertir más en artículos de calidad.