En un contexto de elevada incertidumbre económica y geopolítica, el mercado de metales preciosos experimenta una escalada sin precedentes. Este viernes, considerado festivo en gran parte de Europa, la cotización del oro y la plata continuó su ascendente trayectoria, impulsada por factores determinantes como las compras masivas de bancos centrales y las señales de más recortes en las tasas de interés de Estados Unidos, debilitando así al dólar frente a otras monedas clave.
El oro al contado, protagonista indiscutible del mercado actual, superó por primera vez en la historia el valor de 4.500 dólares por onza el pasado miércoles. Durante la sesión del viernes, este metal precioso no solo mantuvo su tendencia al alza, sino que alcanzó un nuevo máximo de 4.531,24 dólares, marcando así una revalorización diaria de más del 1% y acumulando un increíble incremento del 72% en lo que va de año.
La plata, a su vez, no se queda atrás en esta carrera de valores. El metal blanco aceleró su recuperación con un notable aumento del 5% respecto al día anterior, logrando un récord de 75.485 dólares por onza. Este comportamiento del mercado ha resultado en una asombrosa subida del 150% durante 2025.
El platino también ha sido testigo de una revalorización significativa. En la última jornada, sus futuros registraron un incremento superior al 10%, alcanzando un máximo intradía de 2.475,85 dólares. De manera similar a otros metales, el platino ha experimentado una extraordinaria subida del 170% en lo que va del año.
La debilidad del dólar incentiva la compra de metales preciosos y materias primas
Estos acontecimientos subrayan el sentimiento persistente de los inversores por refugiarse en activos seguros ante la volatilidad del mercado global. Con un dólar debilitado y expectativas de futuros ajustes en las políticas monetarias, los metales preciosos continúan siendo una opción sólida y rentable en el panorama mundial de inversiones.
