Las prendas y complementos de lujo, los productos que más triunfan en el mercado de segunda mano
Precio, exclusividad y sostenibilidad; las claves del éxito del mercado del lujo de segunda mano
Las nuevas generaciones demandan prendas sostenibles apostando por el comercio de segunda mano, pero, además, la Generación Z es gran demandante de productos de lujo apostando por estas prendas exclusivas a precios más económicos dentro del mercado de segunda mano y vintage. En 2021, las prendas y complementos de lujo fueron los productos cuya demanda más creció en el mercado de segunda mano, viéndose incrementada su demanda en un 95,8%.
Para conocer un poco más sobre el mercado del lujo de segunda mano, Capital se desplaza hasta Valencia para hablar con Mariangeles Miguel, fundadora de El Vestidor Vintage.
Desde 2016, en el Vestidor Vintage elegís todas las piezas una a una cuidando hasta el máximo detalle. Dentro de vuestra exposición se pueden encontrar productos de las marcas más exclusivas como Loewe, Chanel, Gucci, Versace o Louis Vuitton. ¿Cómo nace esta idea y por qué Valencia?
Después de una larga carrera profesional como directora en firmas de lujo como Hermès, Salvatore Ferragamo o Max Mara, enlazo mi camino profesional con el Vestidor Vintage, con el objetivo de dar una segunda vida a las prendas que tenemos en el armario y que, por diferentes motivos, ya no utilizamos. En nuestro caso lo hemos hecho seleccionando pieza a pieza y dándole su valor, y sin dejar de ofrecer una experiencia de lujo y una atención personalizada.
"en España, la segunda mano es todavía un recién nacido"
En los últimos años se está viviendo un importante crecimiento de la demanda de prendas de lujo de segunda mano ¿Cómo ha sido la evolución de El Vestidor Vintage en sus 7 años de historia? ¿Habéis notado ese incremento de la demanda en los últimos años?
Ha sido curioso ver la evolución y el comportamiento del cliente por ambos lados: tanto cuando se quieren vender las piezas en nuestra tienda, como para quien la quiere comprar. Respecto a lo primero, nosotras sabíamos que queríamos tener las mejores piezas, las más especiales, cotizadas, raras… Y no sabíamos si lo conseguiríamos. Pero enseguida recibimos prendas maravillosas, ya que en Valencia la moda se ha vivido mucho, sobre todo en los 90 en todo su esplendor. Tras la pandemia, ha habido un fuerte crecimiento en la demanda del servicio de venta, y también, como comentas, del cliente que quiere comprar con la idea de hacer su armario más sostenible.
Cada vez las generaciones más jóvenes demandan productos de lujo ¿Podría decirnos cómo es el cliente tipo de El Vestidor Vintage?
En nuestro caso no se puede decir que nos limitemos a trabajar de cara al público más joven. Hay muchos motivos para comprar lujo de segunda mano y piezas vintage, que cubren diferentes grupos de edad, de segmentos de mercado.
Uno de esos motivos es el precio, que a veces se hace más asequible y en una pieza de lujo, es más notable. Pero también está muy presente en nuestra clientela el perfil que busca una pieza que ya no se fabrica, pero es un icono de una firma que le representa o admira: es evidente un fuerte interés por la historia y el diseño de moda. También encontramos un deseo de huir del fast fashion por un sentido de responsabilidad social y ecológica, y también por el de encontrar una pieza única.
Volviendo al público joven que mencionabas, la generación Z cada vez apuesta más por todos estos elementos, sobre todo la sostenibilidad e individualidad en el sentido de darle más peso a la expresión de la identidad con la moda, todo esto efectivamente lo orienta cada vez más a la segunda mano.
El Vestidor Vintage es una tienda situada en el centro de Valencia, caracterizada por sus muebles vintage, estilo y trato personalizado. Unos valores vitales dentro del mundo del lujo que en los últimos años están pasando a un segundo lugar primando el factor precio y con el auge del comercio electrónico. A día de hoy ¿Qué peso tienen las ventas online dentro de su negocio?
La venta online va creciendo poco a poco. Por el momento hablando en números, supone alrededor de un 25% de nuestra facturación. En esta venta online se incluye tanto la venta en web como en redes sociales. La experiencia de compra todavía tiene mucho peso y valor en el Vestidor Vintage. Encontrar un espacio físico con accesorios de tantas firmas de moda internacionales (Chanel y Hermes…) y nacionales (de Loewe a David Delfín) solo lo podemos ofrecer las tiendas de segunda mano. Nosotras tenemos más de 4.000 piezas disponibles en la tienda física, para todos los estilos y presupuestos, con la posibilidad de descubrir, probarse, conocer…
Hablando de las ventas de productos de lujo vía online, plataformas como Vinted o Wallapop suelen “llevarse” la mayor cantidad del negocio dentro del mercado de segunda mano ¿Cómo les afecta a los comercios locales como el suyo el impacto de estas grandes plataformas?
Estas plataformas facilitan la expansión del mercado de segunda mano, pero hay que tener presente que estas ventas también están sujetas a impuestos que los consumidores desconocen que tienen que declarar. El pequeño y mediano comercio ha de hacerse cargo de ciertos impuestos y gastos de mantenimiento del negocio que condicionan nuestro trabajo y modelo de negocio, pero es probable que de cara al futuro estas condiciones se igualen.
A la hora de comprar moda en El Vestidor Vintage, ¿Qué cree que prima más en la decisión de los clientes: el factor sostenible o el ahorro económico?
Como comentábamos antes, diría que lo primero es el factor sostenible y la búsqueda de pieza única que por su tejido, diseño, época o materiales la hacen especial.
"la generación Z cada vez da más peso a la expresión de la identidad con la moda, todo esto lo orienta cada vez más a la segunda mano"
Mariangeles Miguel, fundadora de El Vestidor Vintage
¿Cree que los consumidores están pasando por alto factores clave como la calidad o la garantía en favor del precio?
En nuestro caso concreto, al trabajar prendas de primeras firmas de alta calidad, nuestro cliente valora más la calidad sin olvidar la ventaja del precio, más asequible que si fuera a comprar la misma pieza recién producida.
Tradicionalmente, el “sueño” de muchos compradores era ahorrar lo suficiente como para poder pagarse un bolso de Chanel, Louis Vuitton,… quedando los bolsos de segunda mano para aquellos que no podían alcanzar ese “sueño” y siendo visto con prejuicios el comercio de segunda mano. Ahora, la situación ha dado un giro de 360 grados ¿Qué ha cambiado en estas nuevas generación con respecto a la concepción sobre los productos de segunda mano? ¿Se han eliminado los prejuicios tradicionales asociados a la ropa de segunda mano?
Se están todavía eliminando. Si se mira con perspectiva y en comparación a otros países europeos, en España la segunda mano es todavía un recién nacido. Los prejuicios van desapareciendo lentamente. Pero desde luego, las nuevas generaciones vemos que buscan piezas icono de épocas anteriores, que ya no se producen y pertenecen a la historia de la moda, que sean sostenibles… Con lo que la visión de estas piezas de segunda mano como algo más valioso aumenta enormemente.
El auge del mercado de segunda mano no está pasando desapercibido en el mundo y cada vez son más las grandes firmas que apuestan por sus propias web de comercialización de productos de segunda mano como es el caso de Inditex o H&M ¿Cómo creen que va a afectar la entrada de las grandes marcas dentro del mercado de segunda mano? ¿Cree que a medio plazo sus principales proveedores como Chanel o Gucci apostarán por implantar sus propias plataformas de venta de segunda mano?
Todo puede ser. La mayor presencia de un cambio en la industria de la moda, de la circularidad, el reciclaje y otros factores que caracterizan la segunda mano, era necesaria desde hace tiempo y por ello va en crecimiento la concienciación y la demanda de la misma. Aunque no sabemos cómo evolucionará este mercado, nosotras continuamos esforzándonos por encontrar las piezas más especiales y hacerlas accesibles a los amantes de la moda.