Las asociaciones de consumidores piden medidas a las juntas electorales y compañías del sector viajes para evitar las cancelaciones en masa
El pasado lunes 29 de mayo Pedro Sánchez anunció un adelanto de las elecciones al día 23 de julio, en plena época vacacional. Durante el mismo mes de 2021 casi 6 millones de españoles decidieron irse de vacaciones. Este adelanto del proceso electoral puede perjudicar los planes vacacionales de cientos de miles de españoles ante la posibilidad de ser miembro de la mesa electoral.
En las últimas elecciones del 28-M, contando tanto titulares y como suplentes, más de medio millón de españoles fueron llamados a acudir a la mesa electoral para ejercer como presidentes o vocales, una labor difícil de evitar. A excepción de algunos casos, que justifican legalmente la ausencia, las personas que no acuden a la mesa tienen que pagar una multa e incluso afrontar penas de prisión. ¿Tendrá esto una repercusión en el sector turismo español?
¿Las elecciones causarán una reducción en el turismo nacional durante este mes de julio?
La posible obligación de tener que asistir a la mesa electoral está poniendo en duda las vacaciones de los españoles. Hay que considerar gastos como tickets de viajes y hoteles, cuyo coste de cancelación puede afectar a muchos electores que ya hayan reservado ese fin de semana para viajar.
Aun así, los expertos no se ponen de acuerdo con las posibles repercusiones de las elecciones. Por un lado, la Mesa de Turismo considera que las elecciones podrían afectar al turismo emisor español. Alertan que las elecciones podrían tener repercusiones negativas en los datos de turismo nacional de este año, que presentaba cifras muy favorables hasta el momento.
La Unión Nacional de Agencias de Viajes (UNAV) tiene una opinión concorde, alegando que la fecha escogida es uno de los periodos más concurridos del verano. Además, coincide con un puente en cuatro de las comunidades autónomas de España.
Por el contrario, desde la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV) y la Asociación de Agencias de Viajes Especializadas (Acave), aseguran que las elecciones no afectarán negativamente a las reservas, ni para el turismo receptor como para el turismo emisor. Aseguran que no es la primera vez que unas elecciones coinciden en el mes de julio y que en aquellos casos el turismo no se vio afectado.
Por su parte, la Mesa de Turismo recuerda que los únicos antecedentes a este caso serían las convocatorias autonómicas de Galicia y País Vasco, en julio de 2020, que no supondrían una buena representación del caso actual.
La disminución de medidas como solución ante la posible avalancha de cancelaciones
Ante la posibilidad de tener que cancelar las vacaciones por la obligación de acudir a mesa electoral, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha solicitado tanto a las Juntas Electorales como a las empresas del sector viajes que reduzcan las medidas para ayudar a los viajeros. Les piden flexibilizar sus criterios para evitar avalanchas de reclamaciones por cancelación de viajes.
Una vez recibida la notificación indicando que van a ser miembros de la mesa electoral, los ciudadanos tienen siete días para alegar ante la Junta Electoral de la Zona cuál es su causa justificada. De esta manera, piden a las Juntas que sean comprensibles ante el contexto.
A las compañías de viajes (aerolíneas, hoteles...), les sugieren tener en cuenta las anulaciones por razones de “causa mayor” y que, en este caso, devuelvan a los consumidores afectados el importe de sus vacaciones.
La organización también propone modificar el artículo 27 de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General para que el nombramiento del presidente de mesa y los vocales sea totalmente voluntario.
Maneras de evitar la mesa electoral
Evitar la mesa electoral es algo bastante complicado que solo ciertos ciudadanos que cumplen requerimientos específicos pueden hacer. Estar de viaje, viviendo en el extranjero o haber pedido el voto por correo no son excusas suficientes. Entre las causas principales por las que una persona puede evitar la mesa electoral hay causas personales y familiares. Las causas personales que permiten a un ciudadano no acudir a la mesa electoral son tener más de 65 años, tener una discapacidad, pensión de incapacidad permanente absoluta o de gran invalidez; tener una incapacidad temporal para el trabajo o tener un embarazo que supere los seis meses o baja por maternidad.
Otras causas personales que en ciertas circunstancias podrían eximir a los ciudadanos de asistir a la mesa electoral son tener una lesión o enfermedad que impida la ejecución de ciertas funciones de la mesa, tener un embarazo de riesgo, una intervención quirúrgica o pruebas clínicas relevantes el día de la votación o ser parte de una religión o comunidad con régimen de clausura.
Los motivos familiares que en todo caso permiten abstenerse de asistir a la mesa son estar al cuidado continuo de niños menores de ocho años o personas con discapacidad por razones de guarda legal, cuidar de familiares de hasta segundo grado de consanguinidad que no puedan valerse por sí mismos, y ser madre en periodo de lactancia con un bebé de menos de nueve meses.
Por último, otras razones que en algunos casos podrían justificar eximirse de la mesa son eventos familiares de especial relevancia e inaplazables para familiares de segundo grado de consanguineidad y ser el tutor de niños menores de 14 años si se acredita que el otro tutor no puede encargarse del menor el día de las elecciones.