Ante el encarecimiento del precio de la vivienda y de los alquileres, sobre todo, en comunidades como Madrid, Cataluña, País Vasco o Baleares, los españoles deben decantarse por una de las dos opciones con las que tener un techo. ¿Seguir pagando un alquiler 'a fondo perdido', o adquirir una vivienda por un precio desorbitado? Grandes cuestiones que a su vez suscitan muchas otras y tan esenciales como si se va a poder hacer frente a los grandes gastos que supone una vivienda, ya sea en alquiler o en propiedad.
Cada vez menos inquilinos que se plantean la compra de viviendas
Según los datos publicados por el portal inmobiliario Fotocasa, la intención de compra de vivienda propia entre los inquilinos ha descendido en 2024 al 48%, en comparación con el 52% registrado en 2023, que representaba el nivel más alto en los últimos cinco años. Esta cifra es también un punto inferior a la de 2022, aunque aún supera el 44% de 2021 y el 41% de 2020.
Este descenso de cuatro puntos entre 2023 y 2024 se observa principalmente en el grupo de inquilinos que planean adquirir una vivienda en un plazo de dos años, cuyo porcentaje ha caído del 20% al 16%. En cambio, aquellos que contemplan la compra en un periodo de dos a cinco años se mantienen estables en el 32%.
Por otro lado, este menor interés inmediato en la compra ha propiciado un aumento en el porcentaje de inquilinos que, aunque no planean adquirir una vivienda en el corto plazo, no descartan hacerlo en el futuro. Actualmente, representan el 33%, frente al 31% de 2023, acercándose nuevamente al 34% registrado en 2022.
También se incrementa el grupo de los que descartan la compra tanto a medio como a largo plazo, ascendiendo al 19%, frente al 17% de 2023.
María Matos (Fotocasa): "Las capacidades económicas de los inquilinos han descendido en los últimos años a medida que ha ido aumentando el precio de la vivienda"
Además, Matos ha resaltado que quienes más sufren son los jóvenes, menores de 35 años, que son quienes más interactúan con el alquiler, y que se ven obligados a destinar una parte considerable de sus ingresos para cubrir este coste, lo que les dificulta ahorrar para el futuro y convertirse en propietarios.
"De hecho, sabemos que el 43% de los inquilinos vive de alquiler por la imposibilidad de comprar una vivienda, un dato que se ha incrementado cinco puntos en tan solo un año", ha añadido la portavoz.
Tal y como informa el CBRE la accesibilidad al mercado de la vivienda en España es uno de los grandes retos a los que nos enfrentamos, ante una evidente falta de oferta frente a la creciente demanda. La dificultad de acceso a la vivienda en España, especialmente en las grandes ciudades y para los colectivos jóvenes, junto a otros factores demográficos y socioculturales, está provocando una evidente traslación de la demanda desde la venta hacia el alquiler. Ante este escenario, el porcentaje de hogares en régimen de alquiler en España pasará de representar el 25% del total de hogares actual a situarse por encima del 26% en 2028.
Las entradas de los pisos cerca de los 70 mil euros de gasto
En los últimos cinco años, el ahorro necesario para cubrir la entrada de una vivienda ha aumentado un 33,82%, alcanzando los 65.122 euros de media, según cifras proporcionadas por el portal inmobiliario pisos.com.
En septiembre de 2019, el precio medio de un inmueble de 90 metros cuadrados en España era de 162.210 euros, lo que requería una entrada estándar del 20%, es decir, 32.442 euros. Sumando un 10% adicional para gastos, el monto total ascendía a 48.663 euros.
Para 2024, el valor medio de la vivienda ha crecido hasta los 217.075 euros, lo que implica una entrada del 20% de 43.415 euros, y 65.122 euros si se incluye el 10% de gastos adicionales. Esto representa un incremento del 15,47% respecto al año 2023.
Ferran Font (Pisos.com): "Los jóvenes enfrentan condiciones laborales menos favorables y, en muchos casos, se ven empujados hacia el mercado de alquiler, lo que les dificulta el ahorro"
Las comunidades más caras donde comprar
Por territorios, si se hace un análisis por comunidades autónomas, destacan cuatro en las que comprar un piso en 2024 es más caro que la media nacional: las Islas Baleares (426.092 euros), Madrid (394.183 euros), el País Vasco (284.255 euros) y Cataluña (267.207 euros).
En cada una de estas la entrada y los gastos adicionales que correrán a cargo del comprador alcanzan los 127.827 euros, 118.255 euros, 85.276 euros y 80.162 euros, respectivamente.
Del mismo modo, aquellas que han experimentado un mayor incremento del precio del inmueble en el último lustro son Madrid (+54,8%), Baleares (+49,87%), la Comunidad Valenciana (+48,77%) y Canarias (+44,79%).
Por el contrario, las zonas con los inmuebles tipo más baratos en 2024 son Extremadura (80.190 euros), Castilla la Mancha (87.777 euros), Castilla y León (120.232 euros) y Murcia (128.439 euros).
En este caso, la entrada de un piso en cada una de estas comunidades es de 24.057 euros, 26.333 euros, 36.069 euros y 38.532 euros, respectivamente.
Hasta 180.000 euros de entrada por una vivienda en San Sebastián
Si nos centramos en las capitales de provincia, en Barcelona, por ejemplo, la realidad es muy diferente, con un precio de compraventa de 469.523 euros, lo cual supone un desembolso inicial de 140.857 euros, sin contar los gastos de ITP.
Caso similar es el Madrid, con inmuebles de 551.104 euros de media que implican una entrada de 165.331 euros o bien el de San Sebastián, con inmuebles de 597.178 euros de media y una entrada de 179.153 euros.
Falta de viviendas para satisfacer la demanda de compra
El sector inmobiliario en España necesita añadir alrededor de 280,000 viviendas al mercado cada año hasta 2027 para equilibrar la oferta y la demanda, según señala la XX edición del barómetro inmobiliario de la Unión de Créditos Inmobiliarios (UCI) y la Spanish International Realty Alliance (SIRA).
Este informe ha examinado la evolución del mercado en la primera mitad de 2024, identificando factores como la escasez de viviendas disponibles para venta y alquiler, un problema que ha contribuido significativamente al aumento de precios en los últimos años.
En esta línea, el estudio advierte que no se espera una mejora en el stock en el corto plazo. Los expertos anticipan una tendencia continua a la escasez en los próximos meses, respaldada por el hecho de que el 89.4% de los profesionales inmobiliarios reconoce escasez de viviendas en el mercado de venta, cifra que asciende al 98% en el sector de alquiler, lo cual representa un "problema estructural que afecta a todas las regiones del país".
CBRE: "La colaboración público-privada es esencial para poner más oferta en el mercado"
Según informa el CBRE, El mercado residencial en compraventa ha mostrado una sólida fortaleza en los últimos meses, impulsado por el rápido descenso de los tipos de interés, el buen pulso del mercado laboral y un crecimiento poblacional mayor del esperado. La demanda creció un 6,5% en términos interanuales (350.000 viviendas vendidas en el primer semestre) favorecida, en parte, por el impacto de las compraventas de extranjeros. El precio de la vivienda registró un incremento del 7,8% interanual, destacando el segmento de obra nueva con la tasa anual más alta desde 2007 (11,2%). Los visados de obra nueva están aumentando a ritmo de doble dígito este año (+13% vs. 1S 2023), pero la oferta sigue siendo escasa e insuficiente para llegar a cubrir la creación de hogares anuales. No obstante, iniciativas como el cambio de uso de suelo terciario (oficinas) a residencial para desarrollar viviendas protegidas de la Comunidad de Madrid son una de las vías para facilitar un aumento en la oferta disponible en el mercado.
Escasez en el mercado de alquiler
En el mercado de alquiler, la escasez de oferta se ha vuelto crítica, con el 98% de los agentes indicando un déficit considerable que se ha acentuado en los últimos años. Este informe subraya que la falta de oferta responde a diversas causas interrelacionadas, generando un mercado limitado y con pocas opciones accesibles para gran parte de la población, en particular para los jóvenes y sectores vulnerables.
La oferta de viviendas en alquiler debería aumentar en un 56% en los próximos tres años
Al consultar a los profesionales sobre las causas de esta escasez, señalan a la Ley de Vivienda como el factor más determinante, seguido de la desconfianza de los propietarios en la efectividad de los procesos de desahucio, especialmente en situaciones de impago. También se destaca la influencia de otros factores, como la dificultad para obtener rentabilidades adecuadas y la tendencia a destinar propiedades al alquiler vacacional, que han contribuido a la reducción de la oferta disponible.