La actividad industrial en las fábricas españolas continuó creciendo en noviembre, aunque el ritmo de expansión se desaceleró en comparación con el mes anterior, debido en parte al impacto de las inundaciones ocasionadas por la DANA, según la última actualización del índice PMI manufacturero. En términos concretos, el índice de noviembre se ubicó en 53,1 puntos, frente a los 54,5 puntos registrados en octubre, manteniéndose por encima del umbral de 50 puntos, que indica estabilidad, por décimo mes consecutivo.
En noviembre se registraron aumentos más lentos de la producción y de los nuevos pedidos, que los encuestados vincularon en parte con la DANA, aunque, a pesar de dicha desaceleración, los ritmos de crecimiento se mantuvieron positivos y se informó de una fuerte demanda subyacente, particularmente en el caso de las ventas internacionales.
Como la producción y los nuevos pedidos aumentaron a ritmos más débiles, los fabricantes españoles también informaron de un crecimiento más lento, tanto de las compras como del empleo en noviembre. En cuanto a los precios, la inflación de los costes de los insumos se aceleró en noviembre, pero se mantuvo moderada y muy por debajo del promedio del estudio, mientras que los precios cobrados bajaron por tercer mes consecutivo.
"Los plazos de entrega de los insumos han empeorado, y los encuestados lo atribuyen a las inundaciones regionales en Valencia. No obstante, los cuellos de botella actuales en el suministro son relativamente moderados en comparación con los retrasos en las entregas que vimos en el pico de la pandemia del coronavirus", ha señalado Jonas Feldhusen, economista junior de Hamburg Commercial Bank.