La organización agraria COAG ha denunciado este viernes los daños ocasionados en los cultivos de Almería debido a las persistentes lluvias de las últimas semanas. Aunque estas precipitaciones han mejorado las reservas hídricas, han perjudicado especialmente a los cultivos hortícolas, tanto al aire libre como en invernaderos.
Según la nota emitida por COAG, los cultivos más afectados incluyen brócoli, pepino, pimiento, sandía y melón, registrando en algunas áreas más de 100 litros de agua. La alta humedad generada por las lluvias es una de las principales causas de preocupación, ya que ha dado lugar a la proliferación de plagas y enfermedades, como la botrytis o el mildio, que provocan síntomas de pudrición en las cosechas.
Los cultivos de sandía y melón están en plena fase de polinización, lo que hace que la amenaza se cernza de forma más patente
Andrés Góngora, secretario provincial de COAG Almería, ha calificado como «preocupante» la situación de los cultivos de sandía y melón, especialmente por el impacto durante su fase crítica de polinización. En este sentido, Góngora ha apuntado que la lluvia ha dificultado la polinización mediante colmenas cercanas, lo que podría disminuir la producción futura.
A pesar de que se había previsto un crecimiento en la superficie sembrada, la situación actual deja dudas sobre si el incremento en hectáreas plantadas se traducirá en una mayor producción. Tal como advirtió Góngora, “los problemas derivados de estas lluvias no parecen irremediables, ya que se espera que continúen durante varios días más”.
Por último, COAG Almería ha solicitado un mayor espectro de herramientas fitosanitarias para enfrentar situaciones excepcionales como la actual. Según Góngora, estas medidas excepcionales proporcionarían un gran alivio a los agricultores en un entorno climático desafiante, donde los recursos para revertir las condiciones son limitados.