El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha afirmado que la respuesta del Gobierno de España ante los aranceles anunciados por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, es hasta el momento «una respuesta equilibrada», que va «en una buena dirección». Sin embargo, advirtió de que debe ser un «plan abierto», dependiendo de la evolución de la situación. Estas declaraciones fueron realizadas durante una comparecencia ante los medios en València, previo a su participación en la clausura del X Congreso Nacional de UGT PV.
Álvarez destacó la importancia de la reunión entre el Gobierno y el Partido Popular para abordar este asunto, enfatizando la necesidad de colaboración entre todos los partidos, salvo Vox, para «afrontar este reto de la manera más unitaria posible, con el consenso político más amplio posible». Además, mencionó que los 14.000 millones de euros destinados por el Gobierno central para su plan de respuesta son «una partida positiva», aunque subrayó que aún se debe «bajar y ver cuál es la afectación real» de las políticas arancelarias.
La Unión Europea debería establecer un «fondo de contingencia» financiado con aranceles cobrados a Estados Unidos
El dirigente sindical añadió que existen «algunas dudas» sobre cómo los aranceles podrían impactar a la industria de componentes del automóvil. Asimismo, destacó que España ya cuenta con «mecanismos» para proteger el empleo, como el mecanismo RED, y otras iniciativas para brindar apoyo a autónomos y empresas según sea necesario.
Álvarez también se refirió a la posición de la Unión Europea, afirmando que «parece que va a mantener una posición unitaria». Defendió que la política comercial está en manos de la Comisión Europea y no requiere unanimidad para las decisiones. Instó a que, si se adoptan medidas arancelarias, se articule un paquete de respuestas y subrayó la importancia de conseguir mercados alternativos, apuntando al acuerdo Mercosur como una posible vía para acelerar decisiones.
En cuanto a la posición de Vox, Álvarez criticó que apoyen las políticas de Trump, describiéndolos como «verdugos». Llamó a sus dirigentes a que aclaren su postura respecto a Trump y su «ruptura de convenios internacionales en relación con el comercio». Subrayó que el actual contexto no sólo es una guerra comercial, sino también una confrontación ideológica que afecta los derechos fundamentales de los ciudadanos.
Un acuerdo de presupuestos desde una perspectiva amplia sería extraordinariamente positivo para el país
Finalmente, ante las preguntas de los medios, Álvarez reiteró que los aranceles pueden visibilizar aún más la necesidad de una política presupuestaria que atienda directamente las necesidades del país y concluyó asegurando que un acuerdo de presupuestos sería beneficioso, independientemente de la situación arancelaria.