El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha tomado la decisión de reducir los tipos de interés en 25 puntos básicos, cumpliendo con las expectativas previamente establecidas. Con esta medida, la tasa de depósito (DFR) se sitúa en el 2,75%, la tasa de referencia para las operaciones principales de refinanciación (MRO) en 2,90%, y la facilidad de préstamo (MLF) en 3,15%. Esta decisión forma parte de un ciclo de flexibilización en curso, después de que en diciembre se llevara a cabo un recorte similar.
La decisión de reducir el tipo de interés se basa en la evaluación actualizada de las perspectivas de inflación y la dinámica de la inflación subyacente
Según explicaron fuentes del BCE, esta reducción se fundamenta en una revisión de las expectativas económicas, en particular acerca de la inflación. A tal efecto, los niveles de inflación en la zona euro han mostrado un incremento del 2,4% interanual en diciembre, lo que representa un aumento de dos décimas respecto al mes anterior y la mayor alza desde julio. Este repunte ha estado vinculado al ligero encarecimiento del coste de la energía, que variaba en un 0,1% después de un descenso del 2% interanual en noviembre.
En cuanto a la situación en distintos Estados miembros de la UE, los mayores incrementos en el coste de la vida se han registrado en Croacia (4,5%), Bélgica (4,4%) y Estonia (4,1%). En contraste, los incrementos más bajos se han observado en Irlanda (1%), Italia (1,4%) y Luxemburgo (1,6%). En España, la tasa interanual de inflación ha aumentado cuatro décimas hasta alcanzar el 2,8%, superando así el promedio de la zona euro