“Hay un cambio cultural en el que los jóvenes están más acostumbrados a pagar por el uso, con el alquiler viven donde quieren”
“Un inquilino adecuado debe tener dos virtudes: que pueda pagar y que quiera pagar”
Alquilar un piso está a la orden del día. Hemos pasado de preferir ser propietarios a ser inquilinos en una década. La inflación, la crisis geopolítica, la subida de precios y la incertidumbre económica han contribuido a que ahora el ciudadano opte por vivir en alquiler y el sector se encuentre en un período de crecimiento sin precedentes. Antonio Carroza, presidente de Alquiler Seguro, lo describe a Capital como una revolución. El ritmo de los alquileres de vivienda, pese a las circunstancias, vive una buena etapa en España, aunque existen algunas asignaturas pendientes de estudio, como la incapacidad de los jóvenes de acceder al alquiler y la alta tasa de morosidad de los últimos dos años.
La evolución de un sector en auge
España se ha convertido en la última década en un país cada vez más de inquilinos que de propietarios. En diez años, desde 2010 a 2020, el porcentaje de población que vive de alquiler se incrementó del 20,2% al 24,9% de acuerdo con los datos publicados por Eurostat, y eso que nuestro país ha sido tradicionalmente más de propietarios. Así lo confirma Antonio Carroza, presidente de Alquiler Seguro: “Este proyecto nace en 2007. En aquel año, solo el 7% vivía de alquiler, para los que yo suelo utilizar el término de los “parias financieros”, porque entonces era un mercado en el que primaba la compraventa y la propiedad de viviendas”.
Nuestro país sigue estando por debajo de la media europea en alquiler de vivienda, pero, en el caso de España, este sector sin duda ha ido ganando protagonismo a lo largo de los últimos años creciendo exponencialmente, sobre todo entre los jóvenes que ven la opción de mudarse a un piso de alquiler más factible. “En la crisis surgida en 2009/2011, con la subida de los tipos de interés, no se podía vender la vivienda, con el alquiler ahora eso no pasa”, expresa Carroza. El alza de los precios, la inflación y la situación económica hace que el ciudadano prefiera la alternativa de vivir en alquiler. “El alquiler no ha vivido una evolución, sino una revolución”, cita el presidente, añadiendo que la preferencia de acceder al alquiler se da, sobre todo, en jóvenes y familias emergentes.
El alquiler como mejor opción para los jóvenes
“Los jóvenes, familias monoparentales y las emergentes son un perfil claro de alquiler. Hay familias de 2 o 3 hijos que incluso cambian de vivienda, siendo propietarios de una casa, para alquilarla y desplazarse a otra”, narra Carroza. Según el Consejo de la Juventud de España, el 85% de los jóvenes con edades comprendidas entre 16 y 29 años continúan viviendo en casa de sus padres, y también se encuentran en esta situación el 33% de los que tienen entre 30 y 34 años. Entre los motivos, destaca que los gastos de alquiler o vivienda suponen para este grupo de edad más del 80% de sus ingresos. “Es muy frecuente actualmente el coliving, es decir, jóvenes que comparten piso antes de plantearse una casa individual”, dice Carroza.
“La nueva generación de jóvenes está muy preparada y disfruta más del consumo que del ahorro. Se está produciendo un cambio cultural en el que los jóvenes están más acostumbrados a pagar por el uso, con el alquiler viven donde quieren. No creo que sean los más perjudicados, el problema es el desempleo que, al final, afecta a todas las generaciones”, comenta el presidente. Desde Alquiler Seguro gestionan 18.000 contratos entre los que los que se incluyen inquilinos jóvenes, pero ¿cómo se conoce cuando un inquilino es el adecuado para alquilar y qué factores se deben tener en cuenta?
Cómo escoger el inquilino “perfecto”
El presidente de Alquiler Seguro enumera dos claves que hacen a una persona ser el inquilino indicado. “Para que un inquilino sea el adecuado debe tener dos virtudes: que pueda pagar y que quiera pagar, así de simple. Que disponga de la capacidad de ingresos para cubrir la renta”. Carroza relata que el deber de Alquiler Seguro es comprobar que estos dos factores se cumplan, que la persona puede económicamente permitírselo, que no sea un moroso profesional o que tenga una trayectoria honesta, entre otros muchos asuntos. “Una vivienda digna ocurre cuando hay satisfacción entre el propietario y el inquilino”, cita Carroza. Además, la compañía ofrece la opción de poder mantenerse anónimo sobre los inquilinos si así lo desean.
Este “anonimato” se establece para que un propietario se puede desentender en cierta medida y sea la empresa la que atienda todas las incidencias y deleguen en ella las funciones, Carroza apunta un 40% de régimen de gestión íntegra. El sector del alquiler es un terreno muy amplio que debe considerar muchos aspectos distintos, que incluso varía por zonas y por ciudades. El presidente cuenta que, por ejemplo, Madrid es muy diverso entre distritos y personas que alquilan y Valencia está más definido por temas laborales. “Las necesidades según el sitio son distintas. Lo bueno del alquiler es que es una solución flexible, ágil y viable”. Dentro de esta variedad, el alquiler se enfrenta a una situación que se agrandó en la pandemia: la morosidad.
La Covid-19 provocó que los impagos en los alquileres creciesen un 66,2% en 2020. Los datos del decimotercer estudio del Fichero de Inquilinos Morosos (FIM) sobre Morosidad en Arrendamientos Urbanos indican que se alcanzaron cotas de morosidad mayores que en los años más duros de la crisis financiera, entre 2009 y 2012. “La pandemia ha sido una crisis corta e intensa que erosionó el pago de las rentas, se produjo un agotamiento del empleo y, básicamente, aumentó el coste de la vida”, comenta Carroza respecto a la alta morosidad. Alquiler Seguro es la primera empresa española que da protección a propietarios evitando la morosidad, ¿cómo se consigue esta tasa de morosidad al 0%?
¿Qué medidas se toman frente a la morosidad?
Para hacer frente a los impagos en los alquileres, Carroza recalca algunas directrices para que la morosidad no suceda. “La mejor manera es establecer medidas preventivas al contrario que algunas compañías de seguros. Lo fundamental es saber asesorar bien a los inquilinos, adecuar la vivienda, usar herramientas profesionales y utilizar un score financiero a través de tecnología e Inteligencia Artificial. Si el inquilino es solvente y fiable, eliminas la gran parte del riesgo”, señala el presidente, que argumenta que la clave contra los impagos se basa en dar soluciones a corto plazo.
Si la empresa encuentra insolvencias más duraderas, ellos se encargan de realojar a estas familias a viviendas más asequibles. Se trata de disponer de la información. A pesar del elevado porcentaje de morosidad y la subida de los precios actual, Carroza es positivo de cara al futuro próximo en 2023 pese a la guerra que está afectando a todo y elevando las cifras en general. “El alquiler ha llegado para quedarse y se está en una etapa floreciente”, concluye el presidente. Medidas como el bono alquiler joven pretenden paliar las dificultades que sufre hoy el sector, pero el alquiler seguirá creciendo. Vivimos un momento donde comprar una vivienda está en la mente de pocos.