La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha alertado sobre la notable desaceleración que está experimentando el excedente bruto de explotación en 2024, lo que está limitando las decisiones de inversión de las empresas, a pesar del dinamismo observado en la economía española durante el año anterior. Según la patronal, «la fortaleza de la economía en 2024 se explica por la recuperación del consumo privado y el vigor del consumo público». Sin embargo, aunque la inversión ha mostrado un aumento, esta sigue siendo la variable más rezagada en este ciclo de recuperación.
Desaceleración del empleo y aumento de las rentas salariales
En un contexto donde el Producto Interior Bruto (PIB) ha repuntado, la CEOE ha señalado que el crecimiento del empleo también se ha desacelerado, situándose en un 2,4%, un descenso respecto al 3,2% anterior. Por su parte, la productividad por ocupado ha crecido, aunque continúa un 2,5% por debajo de los niveles de 2019, antes de la pandemia.
El excedente de explotación bruto supuso el 41,9% del PIB, por debajo del 43,1% que representaba en 2019
A pesar de la desaceleración del excedente de explotación bruto, la CEOE ha destacado la intensidad del crecimiento de las rentas salariales, que han superado el crecimiento del PIB nominal. Al cierre del año, el excedente de explotación bruto representó el 41,9% del PIB, inferior al 43,1% observado en 2019. En contraste, la remuneración de los asalariados ha alcanzado un 48,4% del PIB, un aumento notable frente al 46,7% registrado en 2019.
De cara a 2025, la CEOE ha manifestado que la incertidumbre sigue siendo elevada, aunque se considera que «el balance de los riesgos está en el lado positivo». En cuanto a los riesgos exteriores, la organización empresarial ha señalado el riesgo geopolítico como el más significativo, ya que podría llevar a incrementos en los precios de las materias primas. A nivel interno, advierten que los principales riesgos podrían derivarse de una política económica que genere mayor incertidumbre y costos adicionales para la actividad empresarial, especialmente en el mercado laboral, lo que podría frenar tanto el consumo como la inversión.
Se prevé un avance del PIB superior al 2,5% en 2025
A pesar de los desafíos, la CEOE proyecta que la mejora en la actividad económica en la última parte del año dará lugar a un avance del PIB superior al 2,5% en 2025.