La evolución del sector inmobiliario y de la construcción en España, que representa un 5,7% del PIB, tiene un impacto significativo en la economía nacional, posicionando a esta industria como una de las más importantes de nuestro país. Aspectos como los cambios legislativos en el mercado de la vivienda, el análisis de inversiones en sectores residenciales, oficinas y construcciones hoteleras, el auge del real estate logístico impulsado por el crecimiento del comercio electrónico y las variaciones en los tipos de interés son cuestiones clave para entender la dinámica del mercado. Pero, ¿cómo influye este entorno tan cambiante y crucial en el mercado laboral español?
Según la Guía del Mercado Laboral 2024 de la consultora HAYS, especialista en soluciones de recursos humanos y contratación, el sector enfrenta en España una escasez de talento. Actualmente, según el estudio, el 80% de las empresas inmobiliarias y de la construcción tienen dificultades para encontrar mano de obra cualificada.
Esta situación está llevando a un aumento de los salarios para encargados y operarios de obra, quienes empiezan a equipararse con los de las posiciones más técnicas. "Existen muy pocos especialistas en obra (encargados, oficiales, capataces, carpinteros, entre otros), especialmente entre los 25 y 40 años, dispuestos a trabajar en este sector. Para atraer y retener el talento disponible, y para hacer del sector una opción atractiva para futuras generaciones, ha sido necesario, y seguirá siendo, ofrecer mejores condiciones salariales que compensen el esfuerzo de trabajar día a día en el campo", explica Miguel De la Fuente, Team Manager de Perm Recruitment Services de Construcción y Real Estate en HAYS España.
Los perfiles más demandados
Según los expertos de HAYS, la pandemia y el aumento generalizado de los costes de producción y materiales de construcción causaron una desaceleración en el sector. Sin embargo, actualmente existe una reactivación que muestra una falta real de talento, lo que ha incrementado la demanda de perfiles específicos. En el sector inmobiliario, el principal desafío se encuentra en los departamentos de inversión.
La recuperación del interés de los inversores en el sector inmobiliario ha incrementado la necesidad de asesoramiento para maximizar la rentabilidad. En este contexto, los perfiles más buscados son aquellos enfocados en el desarrollo y la gestión de inversiones y la administración de activos. "Los activos han aumentado de valor, y cada vez más inversores requieren asesoramiento tanto en inversión como en gestión de patrimonio. Se está observando un incremento en el valor de compra de activos residenciales, así como en aquellos destinados al ocio, turismo y retail", añade De la Fuente. "No podemos olvidar los puestos de Facility Management, ya que serán fundamentales para comprender la vida útil de los activos", afirma.
En el ámbito de la construcción, la escasez de talento también es evidente: encargados de obra, especialistas y personal de cuadrilla, como oficiales y capataces, son los perfiles más difíciles de encontrar. "Los profesionales cualificados prefieren ocupar posiciones técnicas en lugar de empleos directamente relacionados con la obra, lo que está dificultando un relevo generacional natural, como ocurre en otros sectores", comenta Miguel De la Fuente.
Al igual que en otros sectores, los profesionales en el ámbito inmobiliario y de la construcción deben ser algo más que expertos técnicos. Según la citada encuesta, el 40% de las empresas del sector considera que las competencias técnicas son cruciales, mientras que la mayoría valora más las habilidades blandas (soft skills) para llevar los proyectos al siguiente nivel.
"En el sector de la construcción e inmobiliario, es muy positivo que los profesionales cuenten con habilidades comunicativas y la capacidad para liderar equipos o gestionar situaciones de conflicto", señala el Team Manager de Construcción e Inmobiliaria. En construcción, la gestión del tiempo y la organización de la carga de trabajo son esenciales. De igual forma, en el ámbito inmobiliario, el trato con el cliente y una comunicación efectiva son clave para cerrar con éxito las operaciones.
